Gracias a su interpretación de Lady Di en la serie The Crown, Elizabeth Debicki ha logrado consolidar su carrera como actriz, sin embargo, también se llegó a enfrentar a varios retos y desafíos para poder darle vida a una de las principales características de la fallecida princesa de Gales. Hoy te contamos de cuál se trata.
Elizabeth formó parte de la aclamada serie de Netflix durante las temporadas 5 y 6, en donde interpretó a la madre de William y Harry, mientras que su magistral actuación la hizo recientemente ganadora de un Globo de Oro a la Mejor Actriz de Reparto, así como un galardón en los Critics Choice Award por la misma categoría.
Los retos y desafíos de Elizabeth Debicki en The Crown
Durante el rodaje de la serie, Debicki tuvo que enfrentar un gran desafío para poder parecerse a Lady Di, que fue tener fue despojarse de su acento australiano, pues recordemos que la joven, aunque nació en París, se mudó a Australia durante la infancia, lugar en el que pasó también su adolescencia y los inicios de su carrera.
Si bien esto fue muy difícil para ella, al grado de sentir que no podía hacerlo y repetirse eso constantemente, la verdad es que logró alcanzar a la perfección ese acento british ya que jamás se rindió. Aunque también, para meterse en el rol, Elizabeth se sometió a una transformación de 30 horas para poder caracterizarse como la princesa del pueblo.
Pero eso no era lo único que debía superar, pues también tenía como antecedente la interpretación de Emma Corrin, que se puso en el papel de Diana en la cuarta temporada de The Crown. Sin embargo, no solo logró demostrar estar a la altura con una magistral interpretación, sino que también logró ser aceptada y aclamada por la crítica.
También, para la actriz australiana la escena más difícil de la serie fue la del accidente de la princesa Diana. “Recrear las últimas horas de Diana en París, acosada por los paparazis, fue difícil”, ya que “aunque no tuve que interpretar mucho, es realmente horrendo tener a tanta gente gritándote y queriendo algo”.
Por último, la artista también expresó que su 1.90 m de estatura fue algo que la acomplejó en su adolescencia ya que le hacían bullying, sin embargo, al final ha aprendido a aceptarse tal y como es, pues no quiere que eso sea una “carga” en su vida.