En el seno de la realeza británica, las decisiones sobre títulos nobiliarios han sido motivo de atención y debate. Siendo el más reciente el de Lady Louise Windsor, quien ha optado por no utilizar el título de “Su Alteza Real” (HRH), a pesar de que el príncipe William habría considerado su integración como miembro activo de la Familia Real.
Lady Louise, de 21 años, actualmente estudia en la Universidad de St Andrews. Aunque sus padres, el duque y la duquesa de Edimburgo, decidieron no otorgarles tanto a ella como a su hermano, James de Wessex, los títulos de SAR al nacer, con el objetivo de brindarles una infancia más normal y alejada del escrutinio público. Esta elección ha permitido que ambos jóvenes royals lleven vidas relativamente discretas.
Cabe resaltar también que, en el caso de Louise, la joven pudo haber optado por usar su título de princesa al cumplir los 18 años, sin embargo, decidió no hacerlo y mantenerse lejos del foco mediático. Algo que podría ir en contra de los planes del heredero al trono británico.
El príncipe William desaría integrar a más miembros activos a Familia Real Británica
Sin embargo, según lo que informó recientemente el Scottish Daily Express, el príncipe William había considerado la posibilidad de que Lady Louise y James asumieran roles más activos dentro de la Familia Real, convirtiéndose en miembros de “La Firma”. Sin embargo, la decisión de Louise de no adoptar el título de SAR sugiere una preferencia por mantener su independencia y enfocarse en sus intereses personales y académicos.
Mientras que Lady Louise y James parecen inclinados a mantener un perfil bajo, su madre, la duquesa de Edimburgo, ha asumido un papel más destacado en la Familia Real. Además que su dedicación ha sido reconocida y valorada por el rey Carlos III y la reina Camila, a pesar de no ser de las royals más populares y mediáticas.
En tanto que la decisión de Lady Louise de rechazar el título de SAR, a pesar de la posible insistencia del príncipe William para que asumiera un rol más activo, subraya una tendencia en algunos miembros de la realeza británica a priorizar la vida privada sobre las obligaciones públicas. Este enfoque permite a individuos como Louise y James forjar sus propios caminos, alejados de las expectativas y responsabilidades que conlleva ser un miembro activo de la Familia Real.