Al igual que los civiles, los miembros de la Realeza tienen que atender cotidianamente a una serie de labores, los cuales implican inauguraciones y asistencias a recintos dedicados a la educación y la beneficencia. Sin embargo, también gozan de momentos de descanso, en los que aprovechan para reforzar su relación familiar.
Además de aprovechar sus tiempos libres para la convivencia, los royals también ocupan sus días libres para salir completamente de la rutina, viajando a destinos vacacionales y entre todas sus propiedades, se encuentra una que definitivamente ha destacado como la favorita.
Cabe destacar que el lugar vacacional preferido por los representantes de la Corona no es fortuito, sino que forma parte de una tradición heredada por generaciones, inaugurada por Isabel Bowes-Lyon, la madre de la reina Isabel II.
Islas Sorlingas, el lugar de relajación favorito de los royals
El gusto por visitar Islas Sorlingas ha sido heredado por generaciones, llegando hasta los pequeños príncipes de Gales: Louis, George y Charlotte, quienes suelen acudir a este destino acompañados de sus padres para navegar el pequeño archipiélago frente a la costa de Cornualles.
En el destino también se pueden realizar caminatas y paseos en bicicleta, actividades en las que han sido captados los miembros de la casa de Windsor en varias ocasiones por paparazzis.
Además, estas islas, ubicadas al oeste de la costa del condado de Cornualles, albergan especiales recuerdos como las vacaciones sucedidas hace 30 años, a las que acudió William en compañía de su madre Diana , su padre Carlos y su hermano Harry.
Por último, cabe mencionar que tanto es el aprecio de este lugar por parte del príncipe de Gales que fue su destino seleccionado para pasar una de sus lunas de miel con Kate en 2011.