El príncipe William se encuentra de visita por Sudáfrica para celebrar el Premio Earthsot, un viaje con el que, además, ha recordado cómo fue el día en el que le pidió matrimonio a su esposa, Kate Middleton, hace más de una década.
Mientras que este emotivo recuerdo se deriva porque, para quienes no lo sepan, fue justo en el continente africano en donde el heredero al trono británico le pidió a la ahora princesa que se casara con él. Por lo que este viaje le ha traído una gran nostalgia al royal de 42 años.
Si bien el príncipe de Gales está por tierras africanas desde el 4 de noviembre y alargará su estancia hasta el día 7, poco antes de emprender su viaje por aquella parte del mundo dio unas declaraciones en las que resaltó lo importante que resulta para él este continente.
"África siempre ha ocupado un lugar especial en mi corazón: como un lugar donde encontré consuelo cuando era adolescente, donde le propuse matrimonio a mi esposa y, más recientemente, como la inspiración fundadora detrás del Premio Earthshot”, apuntó
Mientras que será el próximo miercoles 6 de noviembre cuando el hermano del príncipe Harry se dé cita a la ceremonia de estos galardones que en esta ocasión se realizarán en Ciudad del Cabo. En tanto que este premio tiene como objetivo apoyar e impulsar soluciones innovadores que ayuden a combatir los efectos adversos del cambio climático.
Así fue cómo el príncipe William le pidió matrimonio a Kate Middleton
Es por ello que el príncipe William siempre ha sentido una conexión especial con África, un lugar que ha descrito como su “segundo hogar”. Fue en octubre de 2010, durante un viaje en pareja a Kenia, cuando el royal le pidió matrimonio a Kate, marcando el inicio de su vida juntos.
Se sabe que el heredero a la corona inglesa había planeado cuidadosamente esta sorpresa. Durante unas vacaciones en una reserva privada en Kenia, lejos de las miradas de la prensa y arrodillado en medio de los paisajes africanos, el royal llevó a su entonces novia a una cabaña apartada para pedirle que se comprometieran.
Sin embargo, lo que más llamó la atención de ese momento fue el anillo de compromiso que le entregó William a Kate ya que no era cualquier sortija, sino que se trataba del famoso zafiro ovalado azul rodeado de diamantes que perteneció a su madre, la fallecida Lady Di. Un gesto cargado de simbolismo y que representaba no solo su amor por Kate, sino también un homenaje a Diana de Gales.