Ya han pasado casi dos semanas desde la última aparición pública de los duques de Sussex, el príncipe Harry y Meghan Markle, y la prensa especializada en realeza y estilo de vida no puede dejar de hablar acerca de todos los detalles que conformaron el estilismo de la protagonista de “Suits” durante aquel viaje a las montañas nevadas de Vancouver.
Sus botas, el anillo de compromiso que todos creían desaparecido e, incluso, el novedoso gorro de lana que cubrió su cabeza, son solo algunos de los aspectos que se han destacado en medios acerca de uno de los looks más recientes de la duquesa de Sussex.
Sin embargo, ha sido un detalle muy particular en el aspecto de la royal el que ha despertado aún más las alarmas de todos los radares de moda : el color y forma de su cabello, el cual, según reveló el padre de Meghan, Thomas Markle, ante el Daily Mail, en el pasado llegó incluso a causarle problemas.
¿Qué hay detrás del cabello de Meghan Markle?
“Morena de chocolate con castañas para Meghan”, señala una publicación del salón Highbrow Hippie de Los Ángeles con imágenes de la duquesa en la presentación de los Juegos Invictus de Canadá, el pasado 14 de febrero, la cual enfatiza sobre “la mezcla de matices rojos y dorados” que añaden un tono dinámico de morena a la apariencia de Meghan Markle.
De acuerdo a la publicación, la forma y color de cabello que actualmente luce la esposa del príncipe Harry no solo le otorga a su piel un “brillo más sano”, sino también proporciona al cabello un brillo de alto poder de siguiente nivel”.
Como esa hay muchas otras publicaciones que elogian el cabello de Meghan; sin embargo, su padre, Thomas Markle, asegura que detrás de tan admirada cabellera hay un secreto y una “obsesión” que ha estado presente en la vida de su hija desde temprana edad.
La obsesión de Meghan Markle por alisarse el cabello
El señor Markle, declaró a la corresponsal real Carole Graham que “a veces se levantaba a las 5 de la mañana para ayudar a su pequeña hija a alisarse el cabello con una plancha para asegurarse de que luciera exactamente como ella deseaba.”
Incluso, confesó que durante unas vacaciones, cuando padre e hija conducían a través de Estados Unidos desde su casa en Los Ángeles hasta Florida, se detuvieron en la zona rural de Texas e intentaron encontrar un salón para lavar y alisar el cabello naturalmente rizado de Meghan.
“Probamos con varios, pero nadie nos acogió porque yo era un hombre blanco con un hijo mestizo”, dijo, lo cual denota la discriminación que sufrió la duquesa de Sussex cuando era pequeña por su origen afrodescendiente y por su urgencia por alisar su cabello, el cual ahora resulta la envidia de muchas mujeres por la caida de sus risos.