Después de haber permanecido casados por 14 años, el pasado viernes 19 de abril el príncipe Nicolás de Grecia y su esposa Tatiana Blatnik anunciaron su divorcio por medio de un comunicado publicado en el sitio web oficial de la ex Familia Real.
En el revelador texto se leía lo siguiente: “Deseamos informarle de una decisión significativa y sentida tomada por SAR el Príncipe Nicolás y la Princesa Tatiana. Después de catorce años de matrimonio, han decidido disolver amistosamente su unión”.
“Esta decisión se tomó con gran cuidado y respeto mutuo, lo que refleja la profundidad del aprecio mutuo y los momentos que han compartido”. La declaración continuó de la siguiente manera: ‘Sus interacciones futuras seguirán estando guiadas por estos mismos principios de respeto y comprensión, a medida que hagan la transición hacia una relación arraigada en una fuerte amistad. Continuarán viviendo y construyendo sus vidas en Grecia, un lugar al que ambos llaman hogar. La Familia siempre los apoyará”.
La última vez que se vio a la pareja en público fue en enero de 2024, cuando ambos asistieron al funeral en Windsor para conmemorar el primer aniversario de la muerte del padre del príncipe Nicolás, Constantino II, el último rey de Grecia.
El matrimonio del príncipe Nicolás y la princesa Tatiana llega a su fin
El príncipe Nicolás, alguna vez apodado ‘el Príncipe Playboy’, por su predilección para asistir a fiestas extravagantes con personas como Jemima Khan y Elle Macpherson, se casó con la escritora venezolana Tatiana Blatnik en 2010, en una boda denominada ‘Mamma Mia, con aristócratas’.
El compromiso de Tatiana y Nicolás se anunció el 28 de diciembre de 2009, por la oficina del rey Constantino en Londres, tras varios años de noviazgo y el enlace matrimonial tuvo lugar exactamente el 25 de agosto de 2010 en la isla de Spetses en Grecia, ante familiares y miembros de varias casas reales europeas.
Durante aquel romántico evento, el amor entre la pareja parecía no tener fin.
También cabe recordar como, a manera de cuento de hadas, Tatiana llevó el día de su boda un vestido del diseñador venezolano Ángel Sánchez, portando simbólicamente un elemento de su lugar natal.
Poco después de su boda, Tatiana confesó a una importante revista estadounidense: ‘No me siento como una princesa. No siento que me haya casado con un príncipe, con un título. Bueno, en realidad sí, es mi príncipe, pero nada más.
Por ahora, solo queda esperar para ver si Tatiana continuará con su carrera como escritora, publicista y organizadora de eventos, ahora que ya no estará atada a fingir como apoyo incondicional de las causas benéficas de su ex esposo, el príncipe Nicolás.