Después de que el pasado 31 de agosto se cumpliera el 27 aniversario luctuoso de Lady Di, el hermano de la princesa, Charles Spencer, IX conde de Spencer, salió a hacer una desgarradora confesión, acerca de un hábito que mantuvo mucho tiempo tras la muerte de su hermana, a quien todavía hace referencia en la mayoría de sus entrevistas.
Fue en el programa Good Morning Britain de ITV, donde el ex cuñado del rey Carlos III reveló que después de perder a su hermana en aquel trágico accidente automovilístico en París, solía visitar la tumba de la difunta princesa “prácticamente todos los días”.
Vale la pena recordar que Diana de Gales fue enterrada en la casa ancestral de la familia Spencer, Althorp, exactamente en la capilla de Santa María la Virgen, en Great Brington.
Charles ha sido el custodio de la finca desde 1992, cuando murió su padre, John Spencer, octavo conde Spencer. La ex princesa de Gales está enterrada en una pintoresca isla junto a un lago ornamental enclavado en lo profundo del Pleasure Garden de Althorp Park.
El hermano de la ‘Princesa del pueblo’ agregó: “La semana pasada, uno de sus amigos más cercanos de la infancia vino y estuvo en la isla. Y eso fue muy agradable”. Asimismo, el conde se atrevió a declarar lo siguiente: “Estoy seguro de que casi todos los que ven este programa han tenido algún trauma en su familia en algún momento. Y, como todo el mundo, uno se acostumbra a ello sin que desaparezca nunca”.
También, aprovechando su visita a Good Morning Britain, Charles aprovechó para mencionar que ya tiene una nueva novia: la arqueóloga Cat Jarman.
¿Cómo es la tumba de Lady Di, la cual era visitada todos los días por Charles Spencer?
El cuerpo de la princesa Diana yace en los terrenos de la casa de su infancia, en Althorp Estate, lo cual rompe con una milenaria tradición familiar de los Spencer, quienes descansan en la iglesia de Santa María la Virgen en Great Brington.
El recinto también es conocido como Oval Lake Grave. “Ella está en un lugar feliz y seguro”, dijo su hermano a la revista People después de haber anunciado en un comunicado el lugar que había seleccionado para enterrar a su hermana de manera segura.
Específicamente, la tumba de Diana está ubicada en una pequeña isla en medio del lago artificial dentro de la propiedad, debido a que la superficie acuosa anula en gran porcentaje las posibilidades de que la gente intente acercarse al lugar.
“Su lejanía es totalmente intencional, ya que el lago actúa como un amortiguador contra las intervenciones de los locos y macabros, y el lodo espeso presenta una línea de defensa adicional”, señaló el hermano de la princesa en su libro “Althorp: The Story of an English House “.