El título de monarca emérita de la reina Sofía de Grecia no se lo ha ganado en vano, ya que su experiencia le ha valido a la madre de Felipe de Borbón convertirse en un referente en todos los sentidos cuando hablamos de realeza, incluido el ámbito de la moda, ya que durante sus 85 años de vida, Su Alteza Real se ha encargado de proyectar la mejor imagen para el reino.
En días anteriores, Sofía de Grecia ya se lucía por su compostura y gran porte en el evento homenaje que organizó la reina Camilla Parker de Inglaterra en memoria del último rey de los helenos: Constantino II, evento al que asistió luciendo un atuendo sobrio y una actitud digna de una reina retirada y con un largo camino recorrido.
Posterior al servicio celebrado en la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor, la aún esposa del rey Juan Carlos I reapareció ante el ojo público, demostrando que su agenda sigue casi tan activa como cuando reinaba y la juventud corría por sus venas.
El acto en el que reapareció la reina Sofía de Grecia
Fue durante la jornada del jueves 29 de febrero en la Lonja, sede del Gobierno balear, donde la madre de Felipe VI asistió a que se le fuera entregada la Medalla de Oro de la comunidad autónoma de las Illes Balears 2024, el cual se le fue otorgado por su estrecha vinculación con las islas, su compromiso y su colaboración con diferentes entidades del ámbito social.
Emocionada, la reina emérita recibió el premio de manos de la presidenta de las Illes Balears, Marga Prohens y estuvo acompañada por la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, y por el secretario de Estado de Política Territorial, Arcadi España; así como por otras autoridades locales y miembros del Consejo del Gobierno de las Illes Balears.
El atuendo con el que Sofía de Grecia recibió la Medalla de Oro de la comunidad autónoma de las Illes Balears 2024
Durante el acto, la Doña Sofía pronunció unas palabras de agradecimiento a la comunidad presente y a la sociedad en general “la honra que supone para mí este galardón, que me ha sido concedido por el Gobierno de la Comunidad Autónoma de las Illes Balears”. “He tenido el privilegio de disfrutar durante más de medio siglo, de estas maravillosas islas y de sus gentes, junto a mi familia, donde siempre nos han acogido con tanto cariño, y afecto. Espero seguir haciéndolo muchos años más”, subrayó la royal.
Dicho discurso fue dado mientras se encontraba enfundada en un traje color carmín con coquetos detalles en los puños del blazer y en los pliegues del pantalón sastre. Así mismo complementó el look con vistosos brillantes, entre los cuales se encontraban joyas como un dije y también un curioso guiño a su pasado: un broche de la colección Llum.
Esa pieza, que llevó sobre su sacó rojo, fue realizado artesanalmente en oro amarillo de 18 quilates y brillantes. Mientras que a su vez está inspirado en el Rosetón de la Catedral de Mallorca y el espectáculo de luz que se produce dos veces al año en aquella región, por lo que la reina Sofía no dudó en mostrarse grata por los momentos que ese recinto le ha regalado portando este especial objeto prendado del lado derecho de su atuendo.