El pasado fin de semana Madrid se convirtió en el punto de encuentro para la princesa Amalia de Holanda y la familia real danesa, específicamente los reyes Mary y Federico de Dinamarca, ya que asistieron a una fiesta de cumpleaños muy especial.
La heredera al trono neerlandés arribó el pasado sábado 14 de diciembre a la capital española acompañada de su padre, el rey Guillermo Alejandro, y de su hermana menor, la princesa Alexia, y se hospedaron en el lujoso Hotel Santo Mauro, ubicado en el barrio de Chamberí, conocido por su elegancia y privacidad. Coincidentemente, en el mismo hotel se encontraban los reyes daneses, junto a su hija, la princesa Isabella, quienes habían llegado un día antes.
¿Por qué la princesa Amalia viajó a Madrid?
El motivo por el que la princesa de Orange estuvo en España fue por la celebración del cumpleaños de un miembro de la familia Baumbach, propietaria de la farmacéutica alemana Boehringer Ingelheim, una de las más importantes a nivel mundial. La exclusiva fiesta tuvo lugar en la finca Soto Mozanaque, situada en Algete, un enclave reconocido por albergar eventos de alto perfil.
Entre los sistentes a esta celebración, además de los royals holandeses y daneses, se encontraban también figuras de la aristocracia española, como la duquesa de Medinaceli y Pablo Hohenlohe. Sin embargo, la estancia de la familia real neerlandesa en Madrid fue breve pero significativa. Tras asistir a la celebración, aprovecharon la mañana siguiente para realizar algunas compras en la exclusiva Milla de Oro madrileña, antes de regresar a los Países Bajos al mediodía.
La gran conexión de Amalia de Holanda con Madrid
Por otro lado, la presencia de la princesa de Holanda en Madrid tiene un significado muy especial, dado su vínculo reciente con esta ciudad. El año pasado, debido a amenazas de secuetro por parte de la mafia de su país, Amalia se trasladó temporalmente a la capital española, donde continuó sus estudios universitarios de forma remota.
Durante ese periodo, la joven royal contó con la protección y apoyo de Felipe VI y Letizia Ortiz. Un gesto que el rey Guillermo Alejandro agradeció a los moanrcas españoles cuando estos hicieron un viaje de Estado a los Países Bajos en abril de este 2024, calificándolo como una demostración de amistad en momentos de dificultad.
Es por ello que como muestra de gratitud hacia la ciudad que la acogió en tiempos difíciles, en noviembre Amalia donó un jardín de tulipanes a Madrid, que ha sido plantado frente al Palacio Real, simbolizando el lazo afectivo que mantiene con esta ciudad.