Para los Windsor las malas noticias no dejan de rondar a su alrededor ya que, en medio de la crisis que enfrentan desde hace unos meses, ahora ha trascendido la muerte de Paolo Liuzzi, quien fuera exnovio de la princesa Beatriz.
Aunque su deceso se dio a principios del mes de febrero, justo cuando Carlos III acaba de anunciar su diagnóstico de cáncer, fue hasta ahora que la información de su fallecimiento ha llegado a oídos de la prensa.
La princesa Beatriz, desconsolada por la muerte de su primer amor
De acuerdo con los informes, el cuerpo de Paolo fue hallado sin vida el pasado 7 de febrero dentro de la habitación de un hotel en Miami. Mientras que el oficial Michael Vega, del departamento de policía, aclaró que el deceso está siendo investigado como “muerte por sobredosis”, aunque hasta el momento no ha concluido la investigación ya que sigue abierta.
Posteriormente, los restos de Paolo fueron llevados hasta Long Island, Nueva York, en donde se llevó a cabo el funeral. También se le practicó una autopsia aunque todavía no se ha revelado la causa oficial de muerte que arrojó dicho examen necropsia debido a las leyes de aquella ciudad estadounidense.
Por otra parte, fuentes cercanas aseguran que Beatriz de York está “con el corazón roto” tras la pérdida del que fue su primer amor, según lo que relataron fuentes cercanas a MailOnline.
Ambos comenzaron a salir en 2004, mientras que en ese entonces la hija del príncipe Andrés tenía 17 años y Liuzzo 24 años de edad. Y aunque su noviazgo fue muy intenso y apasionado, el amor les duró hasta 2006 que fue cuando se separaron.
Se dice que el consumo de drogas —que fue algo recurrente en él— habría sido uno de los factores por los cuales Beatriz habría puesto fin a la relación. Incluso, el mismo Paolo llegó a decir a la prensa que habría consumido determinadas sustancias en presencia de la madre de su entonces suegra, Sarah Fergusson.
Mientras que el ahora fallecido también tenía un oscuro pasado con la justicia ya que en 2002 fue acusado de homicidio involuntario tras la muerte de un compañero de estudios en el College of the Holy Cross.
Sin embargo, amigos cercanos declararon a The Sun que temían que su estilo de vida “eventualmente lo alcanzaría” y que no estaba pasando por un buen momento a nivel personal, pues se encontraba luchando con problemas relacionados con las drogas.
