La princesa Leonor se encuentra disfrutando de sus últimos días de vacaciones de verano antes de ingresar a la Escuela Naval de Marín, por ello es que en esta semana fue captada en su vehículo, al volante, mientras daba un paseo por las calles del centro de Palma de Mallorca.
Sin embargo, este momento no solo ha causado furor por el simple hecho de ver a la familia Borbón paseando por las calles, sino también porque justo ello nos recordó a los inicios de su padre, el rey Felipe VI, como conductor ya que ambos coincidieron en un curioso detalle en su debut manejando el manubrio.
Felipe VI y la princesa Leonor coincidieron en este detalle
Fue el pasado 6 de agosto cuando la princesa de Asturias, junto con la infanta Sofía, Letizia Ortiz y la reina emérita doña Sofía, fueron captadas por las cámaras mientras daban un paseo en coche por la Plaza Mayor, en Mallorca, y fue ahí en donde vimos que Leonor de Borbón iba de piloto manejando su automóvil.
Mientras que esta imagen ha maravillado y sorprendido a muchos ya que es la primera vez que vemos a la joven royal manejar un vehículo. Aunque debemos recordar que tras cumplir la mayoría de edad en octubre pasado, la heredera al trono de España sacó su carnet de conducir, por lo que nada le impide estar frente al volante.
Sin embargo, verla a ella en el manubrio ha provocado que nos remontemos a la época en la que su padre, Felipe de Borbón, apenas comenzaba a conducir su propio vehículo. Y si hacemos memoria, nos daremos cuenta de un detalle en el que los dos coincidieron en su debut al volante.
En el caso de Leonor, su primer vehículo es un Seat Ateca color gris que tiene un valor aproximado entre 31.370 euros y 43.900, según los accesorios y equipamiento. Mientras que el primer coche de Don Felipe también fue uno de la misma marca, solo que en diferente modelo ya que el suyo era un Seat Ibiza en tono dorado y el cual actualmente se exhibe en una fábrica de esa empresa.
De hecho, este coche fue un regalo de su padre, el rey Juan Carlos, y se le tuvieron que realizar varias modificaciones para que pudiera usarlo cómodamente y que su gran estatura no fuera impedimento para manejarlo.
Así que, como podemos ver, parece ser que padre e hija tienen gustos muy similares en lo que a automóviles se refiere. O tal vez haya sido una recomendación del propio Felipe, aunque en cualquier caso ambos pueden presumir de haber elegido la misma marca.