Meghan Markle vuelve a estar en el ojo del huracán. Esta vez, la duquesa de Sussex ha generado controversia tras compartir un video en el que prepara waffles junto a sus hijos, Archie y Lilibet, para celebrar el Día de San Patricio. Lo que parecía un tierno momento familiar rápidamente se convirtió en motivo de críticas y especulación en redes sociales.
Critican waffles de Meghan Markle
En el video, Meghan aparece mezclando una masa verde antes de verterla en una waflera, supuestamente un regalo de la reina Isabel II para su nieto Archie. Sin embargo, los seguidores más atentos notaron algo extraño: los waffles servidos parecían demasiado planos y no mostraban las marcas que debería dejar la waflera utilizada en la grabación. Esto llevó a algunos usuarios a especular que Markle podría haber utilizado waffles congelados en lugar de prepararlos ella misma.
Las críticas no se hicieron esperar. Comentarios en redes sociales apuntaban a que la duquesa intenta proyectar una imagen de “mamá perfecta”, pero que en realidad estaría fabricando momentos cuidadosamente planeados para mejorar su imagen pública.
Las veces que Meghan Markle enfrenta dudas sobre su autenticidad
Esta polémica se suma a una larga lista de controversias que han rodeado a Meghan Markle desde su salida de la familia real británica. Sus declaraciones en entrevistas, su documental en Netflix y su podcast han sido objeto de escrutinio, con muchas personas cuestionando la veracidad de sus relatos.
Uno de los momentos más recordados fue su afirmación en la famosa entrevista con Oprah Winfrey en 2021, donde aseguró que se casó en secreto con el príncipe Harry días antes de la ceremonia oficial, algo que luego fue desmentido por el arzobispo de Canterbury.
También ha sido señalada por su relación con el personal de palacio, pues antiguos empleados han declarado que la duquesa solía tener exigencias poco realistas y una actitud poco amable, lo que contradice la imagen cálida y empática que intenta proyectar.
Algunos expertos en imagen pública sugieren que Meghan podría estar utilizando este tipo de contenido para reforzar su marca personal como madre dedicada y espontánea. Sin embargo, el efecto parece estar teniendo el resultado contrario, ya que cada acción que comparte en redes se analiza con lupa y genera más críticas que admiración.
A pesar de los comentarios negativos, Meghan continúa mostrando momentos familiares en sus publicaciones. En las fotos compartidas, además de los waffles verdes preparados para Archie y Lilibet, también se veía un plato decorado con fresas y crema para el príncipe Harry, reforzando la imagen de una familia unida y amorosa.
Si bien esta polémica puede parecer trivial, deja en evidencia el escrutinio constante al que Meghan Markle sigue estando expuesta. Lo que para muchos sería un simple desayuno temático, para sus detractores se convierte en una prueba más de que todo lo que hace es parte de una estrategia cuidadosamente planeada.