El primogénito de la reina Isabel II ya ha vivido la segunda Navidad de su reinado, la primera ostentando oficialmente la corona, y no ha dudado en renovar algunos de los protocolos a los que su madre era devota en estas fechas, mostrándose como un monarca mucho más moderno.
Uno de los cambios más notorios en las tradiciones navideñas, implementados por Carlos, fue la invitación a los hijos de Camilla Parker para pasar las fiestas en la finca de Sandringham.
De acuerdo a un informe publicado por ITV, firmado por el editor de la realeza Chris Ship, durante noviembre, Tom Parker Bowles y Laura Lopes, además de los nietos nietos de la reina consorte, fueron invitados al almuerzo por primera vez este año, representando esto un cambio de lugar para el banquete y la selección de un salón más grande para servir el pavo.
Otros cambios navideños implementados por el rey Carlos III
Por un lado se mantuvieron algunas tradiciones navideñas para los Windsor, como intercambiar regalos de broma en Nochebuena y sentarse a observar por televisión el discurso del rey, transmitido a las 3 pm en Navidad, según reporta la revista People.
Sin embargo, otras cambiaron, como el menú servido por el monarca, el cual se apegó a sus gustos personales y consistió en un buffet frío de embutidos, pescado ahumado y ensaladas.
Otros de los alimentos que se sirvieron en la Navidad de Los Windsor fueron: roast beef, foie gras, lengua de ternera, jamón york, mousse de salmón, rúcula, ensalada de huevos de codorniz y una refrescante ensalada de arroz.
El pino navideño de Carlos III
También llamó la atención la manera en la que el actual soberano rompió con una tradición que data de los años 30, a través de la colocación de un árbol navideño natural, el cual lo acompañó en su tradicional discurso de 25 de diciembre.
Al ser un rey abiertamente “ambientalista”, en su enunciación, Carlos III se dirigió al mundo para aumentar la “conciencia de cómo debemos proteger la Tierra y nuestro mundo natural”.
Igualmente, de pie junto al árbol, contrario a la estética sobria que solía manejar su madre en sus mensajes navideños, el rey invitó a “cuidar de la creación, pues es una responsabilidad que incumbe a personas de todos los credos y de ninguno”, reforzando así su papel como uno de los monarcas más activistas que ha tenido el Reino Unido.
