La reina consorte ha demostrado una y otra vez su carácter fuerte y decidido, y en una de sus más recientes apariciones públicas refuerzó esta idea. Con una actitud segura y sin titubeos, la reina Camilla Parker dejó claro que, aunque su esposo es el rey, ella es quien mueve las piezas del tablero, aseguró el diario Cambridgeshire Live.
La reciente aparición del rey Carlos III y la reina Camilla en el restaurante Darjeeling Express de Londres ha dado mucho de qué hablar. En una visita previa al inicio del Ramadán, la pareja real se unió a un grupo de mujeres musulmanas destacadas en un evento solidario. Sin embargo, más allá del motivo oficial del encuentro, un simple gesto de Camilla Parker ha reforzado la idea de que ella es quien realmente lleva las riendas en su relación con el monarca británico.
Camilla Parker demostró una vez más su carácter dominante al lado del Carlos III
Según la periodista Jennifer Newton, del Daily Mirror, mientras la reina ayudaba a empaquetar cajas de comida, se percató de que su esposo no estaba cumpliendo con la misma tarea. Fue entonces cuando preguntó en voz alta: “¿Dónde está mi marido?” Al notar que Carlos III estaba distraído conversando con otros asistentes, Camilla Parker no dudó en buscarlo y entregarle una caja para que se pusiera a trabajar. Este pequeño episodio, aparentemente inofensivo, ha sido interpretado por expertos en realeza como una prueba más del liderazgo de Camilla en su matrimonio.
“Creo que eso nos da una idea de su relación, porque él puede ser el rey, pero ella es la que realmente está a cargo cuando están en casa”, señaló Newton. Este comentario ha reavivado el debate sobre la dinámica de poder en la pareja real. Aunque Carlos III ostenta el título de monarca, la influencia de la reina consorte en sus decisiones y en su vida cotidiana parece ser significativa.
Así es la influencia de Camilla Parker sobre Carlos III
Desde que asumió su papel como reina consorte, Camilla Parker ha mostrado un carácter firme y una presencia constante al lado de su esposo. Su papel no solo ha sido el de una acompañante, sino el de una consejera clave en la nueva etapa de la monarquía británica.
