La Familia Real Británica vuelve a ser noticia gracias a un nuevo libro en el que exempleados de los Windsor cuentan algunos de los secretos de estos royals puertas adentro, desde la dinámica familiar entre ellos hasta apodos en algunos casos.
Kate Middleton trataría al príncipe William como a su “cuarto hijo”
Según el libro “Yes Ma’am: The Secret Life of Royal Servants”, del experto en realeza Tom Quinn, exmiembros del personal del palacio han compartido algunas experiencias durante el tiempo que trabajaron para la realeza. Por ejemplo, se menciona que Kate Middleton a menudo debe calmar al príncipe William durante sus momentos de frustración.
Una exempleada comentó: “No sé dónde estaría William sin Kate. Ella le calma cuando se pone un poco díscolo. Dice que a veces hay que tratarle como a su cuarto hijo”. Un comentario que daría cuenta de cómo es la relación entre los príncipes de Gales.
El apodo que los príncipes William y Harry le pusieron a Camilla Parker
Sin embargo, en este libro exmiembros del personal de trabajo del Palacio de Buckingham señalan también que los príncipes William y Harry llamaban a Camilla Parker “Cruella de Vil”, en referencia a la villana de “101 dálmatas”. Este apodo sugiere una relación tensa y percepciones negativas hacia Camilla por parte de sus hijastros.
Si bien esto era un dato desconocido, tampoco debería sorprendernos ya que los príncipes nunca han tenido la mejora relación consu madrastra ya que, a final de cuentas, gracias a ella sus padres terminaron divorciados.
Meghan Markle coqueteaba con el príncipe William
No obstante, una de las revelaciones de Quinn en su libro que más sorprendió tiene que ver con Meghan Markle y el príncipe William. Según el autor, la afición de la duquesa por los abrazos habría propiciado que algunos pensaran que estuviese flirteando a su cuñado.
El experto menciona que los “abrazos y besos en las mejillas de la duquesa alimentaron los chismes entre el personal de que Meghan estaba coqueteando con William”. “Obviamente no lo era, pero la tensa atmósfera causada por todo el sentimentalismo (y los chismes resultantes) profundizó la grieta entre los hermanos”, explicó Quinn.
“Kate, William y Carlos tendían a estremecerse cuando ella se acercaba para abrazarlos. Meghan se sintió comprensiblemente herida, ya que aparentemente todos abrazan a todos en California ", escribió el autor. Sin embargo, más allá de esta información no existe prueba alguna de que la duquesa de Sussex tuviera algún interés amoroso por el futuro rey de Inglaterra.
