En las últimas semanas, la Familia Real Española ha tenido que enfrentar varias polémicas que han puesto en entredicho su imagen pública. Desde las demandas legales emprendidas por el rey emérito Juan Carlos I hasta la publicación de fotografías privadas de la princesa Leonor, estos eventos han sacudido los cimientos de la monarquía española.
La polémica por las fotografías de la princesa Leonor en la playa
Por su parte, Leonor de Borbón se ha visto envuelta en una controversia tras la publicación de fotografías en las que aparece en bikini durante una visita a una playa en Uruguay. Estas imágenes, captadas sin su consentimiento, han generado un intenso debate sobre la privacidad de los miembros de la realeza y la ética de los medios de comunicación al difundirlas.
Mientras que fuentes cercanas al palacio de la Zarzuela señalan que la institución monárquica no ha tomado nada bien la publicación de estas instantáneas en la revista Diez Minutos, sobre todo porque ello hace que la atención se centre en algo tan trivial como unas fotos y no en la formación militar que está realizando la joven royal.
Las demandas de Juan Carlos I
Mientras que Juan Carlos I, en un intento por restaurar su honor y reputación, ha iniciado acciones legales contra varias personas de su entorno del pasado.
Así, el emérito presentó una demandacontra su examante Corinna Larsen, una empresaria germano-danesa, por delitos contra el honor Su relación salió a la luz en 2012 y fue objeto de intenso escrutinio público y mediático, especialmente tras la famosa cacería en Botsuana que marcó el principio del fin de la imagen intocable de Juan Carlos. En la demanda, el padre de Felipe VI exige que Larsen se retracte de declaraciones previas que, según él, han dañado gravemente su imagen pública.
Además de Larsen, Juan Carlos ha incluido en esta demanda al abogado suizo Dante Canonica, quien fue director de la fundación Lucum, relacionada con fondos de origen saudí. Se le acusa de fraude en la gestión de dichos fondos.
En tanto que el ex presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, también ha sido objeto de una querella por parte de don Juan Carlos, quien lo acusa de difamación debido a comentarios públicos que considera injuriosos. Sin embargo, cuando salió a la luz esta demanda, la Zarzuela se deslindó de esta acción legal. Lo que indica que nada tiene que ver la Casa Real con este conflicto.
Por otro lado, estos incidentes han tenido un impacto significativo en la percepción pública de la Familia Real Española. Además que estos escándalos podrían amenazar con erosionar la confianza ciudadana hacia la corona. Por ello es que la gestión de Felipe VI y Letizia Ortiz ante estas situaciones será determinante para el futuro y la percepción pública de la institución monárquica en los años venideros.
