La conmemoración del 80.º aniversario de la liberación del campo de concentración Auschwitz-Birkenau reunió este lunes a las principales figuras de la realeza europea, como Letizia Ortiz y la princesa Amalia de Holanda.
El acto, cargado de simbolismo, solemnidad y memoria histórica, tuvo lugar este lunes 27 de enero frente a la entrada principal del antiguo campo de exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau y no solo honró a las víctimas del Holocausto, sino que también marcó el debut de algunos miembros jóvenes de la realeza en ceremonias de este calibre, como lo fue el caso la heredera al trono de los Países Bajos.
¿Quiénes asistieron al homenaje por las víctimas del holocausto?
Entre los asistentes se encontraban los reyes Felipe VI y Letizia de España, quienes llegaron al lugar poco antes de las 16 horas, vestidos de riguroso luto como señal de respeto. La reina consorte compartió asiento con el presidente italiano, Sergio Mattarella, mientras que el monarca español se ubicó junto al rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos.
Además, la princesa Amalia, heredera al trono neerlandés, asistió al homenaje junto con sus padres, los reyes Guillermo Alejandro y Máxima. También se contó con la presencia del rey Carlos III, quien asistió sin la reina Camila, además de los reyes Felipe y Matilde de Bélgica y los monarcas Federico y Mary de Dinamarca.
El lugar donde se realizó la ceremonia, una carpa erigida frente a la entrada principal del campo Auschwitz-Birkenau II, evocaba un ambiente solemne y profundamente simbólico. Mientras que el presidente polaco, Andrzej Duda, abrió el acto con un discurso, seguido por testimonios desgarradores de supervivientes. También hubo una orquesta que interpretó piezas compuestas por víctimas del Holocausto.
Al cierre del evento, tanto los royals como el resto de los presentes encendieron velas en memoria de las víctimas, un gesto a manera de homenaje y que unió a todos en un acto de respeto y reflexión.
El príncipe William y Kate Middleton honraron en Londres a víctimas del holocausto
Mientras Carlos III representó a la Familia Real Británica en Polonia, el príncipe William y Kate Middleton rindieron homenaje pero desde Londres con una emotiva reunión en el edificio Guindhall, donde participaron en una ceremonia solemne de encendido de velas en honor a las víctimas y compartieron una merienda con representantes de la comunidad judía británica y supervivientes del Holocausto.
Kate destacó en este acto por su calidez y cercanía, abrazando y escuchando atentamente los relatos de los asistentes, y mostrando sensibilidad ante ello. La princesa de Gales lució para este evento solemne un conjunto negro de abrigo largo y un collar de perlas, marcando su reaparición pública tras finalizar su tratamiento de quimioterapia en septiembre, mientras retoma gradualmente su agenda oficial.