Fueron los primeros días de agosto de 2023 cuando la princesa Leonor vio cambiar su vida en un giro de casi 360º, debido a su ingreso a la Academia General Militar de Zaragoza, donde deberá permanecer internada los siguientes tres años.
De acuerdo a los últimos anuncios hechos por la Casa Real Española por medio de redes sociales, las nuevas dinámicas de la heredera al trono consisten en participar en extenuantes entrenamientos de corte combativo y en la realización de algunas maniobras bélicas.
Además de las nuevas rutinas a las que se ha adscrito la joven Alteza, llama la atención un misterioso documento que se le ha hecho memorizar a la royal para completar al cien por ciento su nuevo estilo de vida de cadete.
Puntos del decálogo de “Dama Cadete” que ha tenido que jurar Leonor de Borbón
- Tener un gran amor a la Patria y fidelidad al Rey, exteriorizado en todos los actos de su vida.
- Tener un gran espíritu militar, reflejado en su vocación y disciplina.
- Unir a su acrisolada caballerosidad constante celo por su reputación.
- Ser fiel cumplidor de sus deberes y exacto en el servicio.
- No murmurar jamás ni tolerarlo.
- Hacerse querer de sus inferiores y desear de sus superiores.
- Ser voluntario para todo sacrificio, solicitando y deseando siempre el ser empleado en las ocasiones de mayor riesgo y fatiga.
- Sentir un noble compañerismo, sacrificándose por el camarada y alegrándose de sus éxitos, premios y progresos
- Tener amor a la responsabilidad y decisión para resolver.
- Ser valeroso y abnegado.
¿Para qué y quiénes deben cumplir el mismo decálogo de la Princesa Leonor?
Absolutamente todos los estudiantes que ingresan a la misma institución militar que la primogénita del rey Felipe VI deben memorizar y llevar a cabo el mismo decálogo, pues este documento se les otorga al iniciar su formación.
Cabe destacar que en la generación de la próxima reina de España se han matriculado otras 139 mujeres, de un total de 612 cadetes, quienes con el fin de concretar su “espíritu militar” deben recitar los principios de la armada en cada control nocturno.
Otro dato curioso que destaca sobre el decreto es que fue redactado en 1927 y desde entonces es memorizado y dicho con fervor por todos los miembros que pasan por la Academia.
El único punto que con el tiempo ha sufrido leves modificaciones ha sido el primero, de acuerdo a los cambios en el ordenamiento de las Reales Ordenanzas para las Fuerzas Armadas.
