El pasado fin de semana la princesa Leonor zarpó a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano desde el puerto de Cádiz. Un viaje en altamar que forma parte de su formación militar y que, ahora, ha tenido su primera parada en Tenerife.
Ha sido este viernes 17 de enero, cerca de las 9 de la mañana, cuando el buque atracó en esta región de las Islas Canarias. Luego, Leonor de Borbón, así como el resto de sus compañeros, descendieron del barco acompañado de vítores de quienes presenciaron su llegada.
Todos los detalles de la llegada de la princesa Leonor a Tenerife
En medio de una gran expectación, los guardamarinas y Leonor alzaron su gorra a manera de saludo para después
hacer su entrada en tierra firme, para la cual lucieron su uniforme de verano de la Armada. Este traje, compuesto por pantalón blanco, camisa de manga corta y detalles a juego, no pasó desapercibido.
Sin embargo, fue el uniforme de la princesa de Asturias el que capturó todas las miradas, gracias a las tres condecoraciones que llevaba: la Orden de Carlos III, el mérito militar y la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio. Su semblante, si bien reflejaba el cansancio de seis intensos días de navegación, también denotaba la determinación de quien se prepara para futuras responsabilidades.
Por otra parte, la Casa Real Española ha sido enfática al dejar en claro que Leonor es una más de la tripulación no tendrá privilegios. Por ello es que durante su estancia en Tenerife, compartirá las mismas obligaciones que sus 75 compañeros. Aunque no hay actividades oficiales planeadas más allá de las tareas en el barco, se espera que el grupo participe en actos culturales y aproveche la oportunidad de explorar la isla en su tiempo libre.
Asimismo, Pedro Suárez, presidente de la Autoridad Portuaria, confirmó que el enfoque es dar normalidad a la experiencia de Leonor como guardamarina, dejando de lado el peso de su título real.
El viaje de la prinesa Leonor a bordo del buque Elcano
Tras su paso por Tenerife, el buque escuela Juan Sebastián Elcano zarpará rumbo a Las Palmas antes de iniciar su travesía hacia Brasil, donde llegará justo a tiempo para el famoso carnaval de Salvador de Bahía.
Mientras tanto, Leonor continuará enfrentándose a los desafíos de la vida marinera, incluyendo el temido “mal de tierra” que podría afectarla tras largos periodos en alta mar. Pero como lo demostró su llegada, la princesa está más que lista para afrontar esta etapa con determinación y compromiso