Por ser un lugar apacible, el Castillo de Windsor fue el lugar que la reina Isabel II eligió como recinto de retiro. Durante sus últimos años de vida, la fallecida monarca eligió este lugar ubicado en el condado de Berkshire para pasar los fines de semana, ya que tanto a Felipe de Edimburgo como a ella les parecía el lugar ideal de descanso.
Sin embargo, más allá de ser el lugar predilecto de la reina para la relajación, este palacio alberga decenas de historias, al ser un recinto construido casi hace un milenio.
El complejo arquitectónico actualmente se destaca por ser el lugar donde se encuentran enterrados los restos de Isabel, exactamente la Capilla Memorial del Rey Jorge VI, donde pasarán el resto de la eternidad junto con otros miembros fallecidos de la Familia Real Británica.
El Primer monarca en residir en El Castillo de Windsor
El castillo de Windsor no fue usado durante sus primeros años como residencia. No fue hasta el año 1110, cuando el rey Enrique I decidió mudarse bajo sus muros.
La construcción mezcla varios estilos arquitectónicos
El diseño del castillo mezcla principalmente el estilo georgiano y el victoriano, pero mantiene una estructura medieval, con toques góticos reinventados en un estilo moderno. Según el libro arquitectónico de Hugh Roberts que analiza el desarrollo de construcción de Windsor, desde el siglo xiv la arquitectura del castillo ha intentado crear una reinterpretación contemporánea de estilos y tradiciones del pasado, para lo que ha imitado repetidamente estilos antiguos o pasados de moda.
Sufrió un fuerte incendio en 1992
Quince horas de fuego sofocaron las instalaciones del castillo en el año 1992. Se cree que el siniestro fue provocado por la llama iniciada en una cortina que tuvo contacto con un foco que era utilizado para iluminar las labores de renovación de la entonces la Capilla Privada en la esquina noreste de los Apartamentos de Estado.
El programa de restauración tras el incendio se extendió hasta 1997 con un coste total de 37 millones de libras.
El recinto posee una cantidad impresionante de habitaciones
El palacio nombrado como el castillo habitado más antiguo del mundo cuenta con 1000 habitaciones y ha sido el hogar de 39 monarcas a lo largo de su historia.
El lugar turístico británico por excelencia
Parte parcial del Castillo de Windsor se encuentra abierto al público y anualmente recibe a 1.5 millones de turistas aficionados a la historia de la Corona Real Británica.
Ahora ya sabes solo algunos de los miles de datos curiosos que alberga la historia del Castillo de Windsor, el recinto real favorito de la reina Isabel II que mantendrá en sus entrañas los restos de la monarca más longeva que ha tenido el Reino Unido.