A casi 15 años de su llegada a la monarquía monegasca, Charlene Lynette Wittstock, conocida simplemente como Charlène de Mónaco, ha ido construyendo su propia imagen que la distingue en cada una de sus apariciones oficiales. Es el caso de su llegada al Côtes-d’Armor, donde gracias a la vestimenta que eligió, dio cátedra de que puede conservar su estilo, al mismo tiempo que funge como referente de estilo para las mujeres de +40 que están buscando renovarse sin arriesgar la sofisticación.
Los trajes sastre siguen siendo tendencia para las +40 y Charlène de Mónaco lo demostró
Durante su paso por este evento en memoria de Jacques III de Matignon, al que acudió acompañada de su esposo Alberto II de Mónaco; y de sus mellizos Jacques y Gabriella, Charlène de Mónaco se enfundó en un conjunto tipo sastre que causó furor. Este look constó de un par de pantalones con caída fluida y chaqueta tipo americana efecto holgado, ambos en color café y con estampado de cuadros.
Si bien a primera vista podría parecer un fit anticuado, llevado a la realidad se transforma en una apuesta obligatoria para mujeres +40 que quieran verse sofisticadas y elegantes, todo sin caer en efectos que opaquen la imagen. Para darle mayor atención al efecto estilizado que este tipo de prendas otorgan, la princesa y nadadora profesional retirada, optó por un cuello de tortuga negro, y concluyó con un diseño de flats de terciopelo negros, que le dieron la comodidad necesaria para desplazarse entre sus múltiples obligaciones reales y deberes como madre.
El secreto de Charlène de Mónaco para conservar el sello personal de su imagen
Aunque la princesa de Mónaco no es entusiasta de presumir sus rituales de estilismo, sí está claro cuáles son algunos de los trucos que recurre para cumplir con los protocolos que su nombramiento requiere. Esto incluye aspectos como su peinado, mismo que ha conservado prácticamente igual en los últimos años, ya que a pesar de que ha pasado por distintos cortes como el pixie y el bob, siempre suele peinarlo en moños recogidos que dejan su rostro al descubierto, lo que termina de suavizar sus facciones gracias al rubio con tintes caramelos que le dan vida a su melena, así como por el poco maquillaje que prefiere llevar.
