El Castillo de Balmoral era considerado el lugar favorito de la Reina Isabel II, puesto que allí pasaba todos los veranos y vivió desde pequeña, siendo para ella su sitio preferido, entre otras razones, porque era ideal para ‘descansar y alejarse de la prensa.
Incluso, fue en este castillo donde la monarca se enteró de la muerte de Lady Di y el lugar donde pasó sus últimos días, lo que indica el gran apego que tenía por esta propiedad.
Está situado en Aberdeenshire, un consejo de Escocia en el Reino Unido y es conocido por ser el lugar donde la realeza disfruta la temporada veraniega, pues se pueden ‘soltar’ un poco más por su lejanía.
También, en varias ocasiones se ha mencionado que en Balmoral, los Windsor se comportan más deshinibidos, disfrutan de los juegos de mesa y de excursiones a los alrededores del castillo, así como partidas de caza. Lo cual hace que sea el sitio favorito de los miembros de la familia real para alejarse del protocolo y la prensa.
El Castillo de Balmoral
Esta estructura fue adquirida por el príncipe Alberto en 1852 para su esposa, la reina Victoria, y desde entonces se ha convertido en una de las propiedades más apreciadas de la realeza.
El castillo de Balmoral es un palacio tardomedieval del siglo XV, aunque su apariencia es de la época historicista victoriana del siglo XIX y, con el tiempo, se le han hecho ampliaciones, remodelaciones y adhesiones de terrenos contiguos.
La finca incluye 150 edificios así como terrenos dedicados al aprovechamiento forestal y a la agricultura, así como rebaños de ciervos, por lo que trabajan a tiempo completo unas 50 personas, pero en épocas de mayor movimiento llegan a ser hasta 150 trabajadores.