A más de u año de asumir el trono, Carlos III ha enfrentado cuestionamientos de su pueblo, conflictos familiares y, por irónico que suene, problemas con plumas estilográficas. Ahora, es el mismo monarca quien recuerda lo pasado y aprovecha para hablar de la importancia del buen sentido del humor.
“El sentido del humor británico es mundialmente conocido. No es lo que hacemos. Nuestra capacidad para reírnos de nosotros mismos es una de nuestras grandes características nacionales. Menos mal, dirán ustedes, dadas algunas de las vicisitudes a las que me he enfrentado este último año con plumas estilográficas que fallaban de manera frustrante”, comentó recientemente.
Carlos III y el poder del humor
El mensaje hace referencia a un penoso incidente protagonizado por Carlos III y una pluma estilográfica que chorreaba tinta. Esto ocurrió días después de la muerte de la Reina Isabel II, cuando tuvo que firmar el acta de proclamación y la pluma falló. Este hecho generó un gesto de frustración en el nuevo rey.
Más de un año después, el monarca comentó lo ocurrido durante la visita que hizo hace unos días a la City de Londres, donde Camilla lució una espectacular tiara herencia de la Reina Isabel.
En su discurso, el monarca expresó su inquietud ante temas ambientales y sociales, como los efectos del cambio climático, pero también habló sobre el poder curativo del humor, haciendo referencia a cómo ha abordado un momento incómodo que ocurrió en sus primeros días de reinado.
Las decisiones del rey
Pero, debemos ser justos con Carlos III, si bien no es el rey más popular, sorprende que sí es el que más reformas y cambios ha hecho, y eso que sólo lleva un año, como las que nuestra experta en realeza. Érika Roa nos enlista algunos cambios implementados en su reinado:
- El adelgazamiento de la familia real. La reina Isabel II era una mujer muy generosa que no se olvidaba de los suyos, como es el caso de sus primos Eduardo o Michael de Kent, que vivieron en algunas de sus residencias, como el Palacio de Kensington, además de recibir ayuda económica.
Pero apenas llegó Carlos III, se anunció que se reduciría la familia real y sólo recibirían ayuda económica o pago los miembros activos y con agenda oficial. Los demás tienen que valerse por sí mismos. - Cambió la agenda de las residencias reales al ampliarse las fechas de su apertura al público, de tal manera que la gente pueda disfrutar más de ellas en periodos vacacionales, como sucedió este verano con el castillo de Balmoral en Escocia.
Detrás de esta decisión hay un objetivo económico para recaudar más fondos y así cubrir los gastos de mantenimiento (que en el caso de Balmoral es de 3 millones de libras). - El monarca inglés lleva décadas hablando del cambio climático pero hasta los últimos años es considerado toda una autoridad en el tema como sucedió en la cumbre de Glasgow en 2022, donde todos lo escucharon atentamente, incluido Joe Biden que reconoció a Carlos III: “Tú tienes todo esto en marcha”.
Es interesante ver cómo Carlos III ha podido tratar momentos incómodos con humor, y le ha ganado a la batalla a las “caprichosas” plumas estilográficas, sin quitar el dedo en el renglón sobre temas de relevancia mundial, como lo es el cambio climático.