Los príncipes Federico y Mary de Dinamarca han realizado esta misma semana su primera aparición pública desde que se dio a conocer que la reina Margarita abdicará al trono danés, a mediados de enero. La pareja real asistió a una tradicional cena de Año Nuevo, en donde además de lucir increíbles outfits de gala, se les veía muy sonrientes, contentos y con un buen semblante.
Esto llamó bastante la atención ya que difiere bastante de la imagen que dieron en sus últimas apariciones, en las que se notaban muy serios entre sí y casi no se dirigían la palabra. Eso sin contar también que fueron contadas las veces que presenciaron juntos un compromiso o acto oficial desde que se publicaron las polémicas fotografías del príncipe Federico con Genoveva Casanova, en noviembre pasado.
Sin embargo, parece ser que la noticia de que Margarita dejará de ser monarca muy pronto y cederá el trono a su hijo mayor, ha calmado las aguas en la relación de estos royals. Pues recordemos que, al ser Federico quien heredará el reino danés, su esposa Mary Donaldson se convertirá automáticamente en reina consorte.
Federico y Mary de Dinamarca reaparecen luego del anuncio de la reina Margarita
Mary y Federico acudieron el pasado 1 de enero a la tradicional cena de gala con la que la Familia Real Danesa recibe al Año Nuevo, en donde se dan cita miembros del Gobierno y los representantes del país, concretamente a los Cuerpos de Oficiales, el Cuerpo Diplomático, las Fuerzas Armadas y la Agencia Danesa de Emergencias.
Asimismo, los invitados a este evento —al que obviamente asistió la todavía monarca Margarita II— disfrutaron de una maravillosa velada en el Palacio de Amalienborg junto a los royals daneses.
Cabe resaltar que a la llegada de los príncipes herederos, la gente que se encontraba a las afueras del recinto dedicó unos aplausos al matrimonio, quienes lucían impecables y felices luego de varias semanas llenas de polémica y tensión.
Por su parte, la princesa Mary eligió para la ocasión un elegante vestido largo de terciopelo en color granate, de la firma danesa Birgit Hallstein, y una tiara floral de rubíes. Mientras que Federico llevó el uniforme de oficial del ejército.
Así pues, parece ser que el escándalo de la infidelidad del príncipe Federico ha quedado atrás y ahora, por fin, se centrará en su inmediato futuro como nuevo rey de Dinamarca después de tantos años de espera.