De acuerdo con el diario británico The Sun, la reina Isabel II le regaló a su nieta, la princesa Beatriz de York, hija mayor del príncipe Andrés y Sarah Ferguson, una mansión de siete habitaciones, valuada en 1.5 millones de libras esterlinas. Este dadivoso obsequio para la primogénita se le habría concedido en su noveno cumpleaños, en 1997.
El medio citado acota que actualmente la propiedad vale 4.2 millones de libras esterlinas y que a pesar del gran lujo que ostenta la mansión, la princesa no puede usarla, ya que ya ha sido vendida.
¿Cómo es la lujosa propiedad que la reina Isabel regaló a Beatriz de York cuando solo era una niña?
The Sun asegura que Beatriz y su hermana Eugenie recibieron el Birch Hall, catalogado como Grado II, en 1997, después de que sus padres, el príncipe Andrés y Sarah Ferguson , finalizaran su divorcio el año anterior.
Aunque, el dato más curioso respecto al obsequio es que ninguna de las dos hermanas York llegó a vivir ahí, por lo que más tarde, la reina ordenó que la casa fuera comprada por fideicomisarios en su nombre, aunque Sarah terminó rechazando la oferta.
La casa con sede en Surrey cuenta con siete habitaciones, cinco acres de tierra, una piscina climatizada al aire libre y una cancha de tenis .
En su interior también contaba con cinco salas de estar y cuatro baños. Además contaba con una cabaña separada de dos habitaciones para el personal en el terreno.
¿Qué pasó con la lujosa casa que la reina Isabel le regaló a la princesa Beatriz de York?
Según The Sun, Birch Hall se vendió en 1999 y el dinero obtenido de la transacción pudo haber pasado a alguna cuenta de fideicomiso de la princesa Beatriz, debido a que esta propiedad fue un regalo de su abuela.
“Desde entonces, la casa ha experimentado un gran aumento de valor y en 2016 volvió a ponerse a la venta por 4,2 millones de libras”, destaca el medio.
Asimismo, el artículo citado menciona que los propietarios actuales de la propiedad han actualizado su estructura, agregando un invernadero, una sala de juegos y un gimnasio en casa.
Andrew Russell, de la agencia inmobiliaria Strutt and Parker, dijo al Daily Mail: “Es probablemente una de las mejores casas de pueblo del norte de Surrey, no hay muchas en el mercado.
“Es una casa de campo de dos hectáreas de terreno. La casa en sí es una propiedad muy atractiva e imponente.
“Algunas de las habitaciones son realmente espectaculares, con techos altos y ventanas de guillotina que van desde el piso hasta el techo.
“Tiene piscina, cancha de tenis y hermosos árboles ejemplares que datan de la época victoriana en el jardín”, señala la inmobiliaria.