En fechas recientes, Estocolmo se vistió de gala para la entrega de los Premios Nobel, y las mujeres de la familia real sueca se convirtieron en las auténticas protagonistas de la noche. Con vestidos de alta costura, joyas y tiaras, la reina Silvia, la princesa Victoria y sus hermanas demostraron porqué son consideradas un referente en el mundo de la moda.
Como ya es costumbre, la reina Silvia de Suecia deslumbró con un elegante vestido metalizado en tono azul (otro gran protagonistas de la noche), el cual combinó con la imponente tiara de Leuchtenberg. Esta pieza, adornada con enormes zafiros, le otorgó un aire de sofisticación y majestuosidad. Por su parte, la princesa Victoria de Suecia optó por un vestido de gasa en color morado con los hombres descubiertos, detalle que realzó su figura y elegancia. Para completar su look, eligió la tiara Baden, una de sus favoritas, compuesta por 47 barras de diamantes de diferentes tamaños.
Sofía Hellqvist, embarazada, también destacó con un original vestido azul que resaltaba su figura. Para complementer su look, la princesa escogió la tiara de diamantes que, de acuerdo con Lecturas, le regalaron sus suegros para su boda, decorándola con pequeños zafiros que le daban un toque especial.
Tiaras, el accesorio de la realeza que se ha vuelto atemporal
Las tiaras se convirtieron en las grandes protagonistas de la noche, demostrando que estos accesorios no solo son símbolos de realeza, sino también piezas de joyería que pueden elevar cualquier look. Las mujeres Bernadotte demostraron una vez más su exquisito gusto y su capacidad para lucir las joyas más exclusivas con elegancia y naturalidad.
Recuerda que las tiaras, símbolos de historia, poder y sofisticación, siguen siendo el accesorio real por excelencia, y las mujeres de la familia Bernadotte nos recuerdan, una vez más, su elegancia intemporal.