Hace 86 años nació Juan Carlos Alfonso Víctor María de Borbón y Borbón. Si bien no se celebra una cifra redonda, el rey emérito decidió festejar su cumpleaños entre pequeños lujos y grandes ausencias. Aquí los detalles de cómo celebra en Abu Dabi.
Tras ser investigado por enriquecimiento ilícito (el caso Nóos) y justificarse que padecía problemas de salud, el rey Juan Carlos I abdicó del trono en 2014 y después se autoexilió (lejos de España y de su esposa, la reina Sofía). A principio se decía que había viajado a la República Dominicana, después se dijo que se había instalado en Portugal, pero desde hace un par de años se sabe que su residencia está en Abu Dabi, Emiratos Árabes.
“S. M. el Rey Juan Carlos ha indicado a la Casa de Su Majestad el Rey que comunique que el pasado día 3 del presente mes de agosto se trasladó a Emiratos Árabes Unidos, donde permanece en la actualidad” confirmo la Casa Real de España, en 2020.
Ironías de la vida, el padre del rey emérito partió hacia el exilio al imponerse la II República en España, en 1931. Por esa razón, Juan Carlos I nació en el exilio. “Juanito” nació en el edificio número 122 del viale dei Parioli, Roma, Italia.
Ahora, 86 años después, lejos del país que lo vio coronarse rey y en el que, en su tiempo, evitó un golpe de estado y realizó elogiadas reformas, Juan Carlos se encuentra en “un buen momento” (según fuentes cercanas) para ser el anfitrión de un importante festejo.
Así celebra sus 86 años Juan Carlos I
Aunque al principio se hablaba de una impresionante lista que ascendía a los 100 invitados, la agencia EFE reporta con se redijo a unos 80 asistentes. Las infaltables son sus hijas, las infantas Elena (quien hace semanas cumplió 60 años) y Cristina (58), así como sus nietos Felipe Juan Froilán (25) y Victoria Federica Victoria Federica (23), que son hijos de Elena, y algunos de los hijos de Cristina –Juan Valentín (24), Pablo Nicolás Sebastián (23), Miguel (21) e Irene (18)–, pues los más pequeños siguen estudiando.
“Es el día de su cumpleaños y es la fecha ideal para que la gente le dé su apoyo y le demuestre que, a pesar de los últimos acontecimientos que manchan, aún más, su nombre, sigue siendo el rey”, adelantaba Pilar Eyre en Lecturas.
Se trata de la primera ocasión en la que el rey es anfitrión de una celebración multitudinaria, la cual pretende ser una reunión amena, de larga duración y con elementos que flamencos e hispanos, tal como describe El Mundo.
De acuerdo con el periódico español: “La periodista Paloma Simón es conocedora de que Su Majestad pidió para el menú productos made in Spain, como jamón y ventresca de atún. Y, a confirmar, el vino de Marqués de Murrieta”. Simón también afirmaba que el dresscode de la ocasión era “Marbella”.
Además de su familia, también se sabe que estará rodeado de numerosos amigos y gente de confianza, desde políticos, como Felipe González, aliados, como Fernando Almansa, ex jefe de la Casa de S. M. el Rey y vizconde del Castillo de Almansa, hasta la astróloga Cristina Franze, así como nobles titulados, empresarios, banqueros, periodistas, compañeros de caza y hasta algunos militares.
Las notorias ausencias
Para Eyre, hay una importante razón detrás de este festejo: “El emérito quiere demostrarle a su hijo, que precisamente está pasando la peor época de su reinado, que él sí tiene un amplio respaldo social, por mucho que su nombre se arrastre de plató en plató y desde Zarzuela se le intente apartar y humillar”.
Considerando dicho contexto como cierto, las ausencias de los actuales reyes de España, Felipe y Letizia; la princesa heredera, Leonor y la infanta Sofía no deberían de causar mayor sorpresa.
Lo cierto es que Felipe, Letizia y Leonor tienen que asistir a la ceremonia de la Pascua Militar en el Palacio Real de Madrid el sábado 5 de enero. Mientras que la infanta Sofía habría regresado a Gales, para continuar sus estudios.
Tampoco asistirá la reina Sofía. La soberana emérita ya viajó a Atenas, Grecia, pues participará en la misa en recuerdo de su hermano, el rey Constantino, fallecido el 10 de enero, hace un año.
Acompañado de sus hijas, nietos, colaboradores y amigos, Juan Carlos I encontró en su cumpleaños 86 una oportunidad de celebrar, algunos leyeron este acto como un autohomenaje, mientras que para la experta Laurence Debray opina que el soberano emérito “saborea la comida española que tanto echa de menos, y las melodías de la música flamenca. Por un momento se sentirá en España, el país al que ha dedicado su vida”.
