A pesar de los constantes rumores sobre un posible regreso a España debido a su avanzada edad Juan Carlos I sigue viviendo en Abu Dabi, sin embargo, su estado de salud es un tema recurrente, por lo que el rey emérito mantiene consultas médicas para mejorar su condición física. Sin embargo, cada vez sería más frecuente oírle hablar de la muerte y la preparación de sus últimas voluntades.
Según informaciones de Monarquía Confidencial, el tratamiento experimental que recibía en Ginebra para recuperar la movilidad de su pierna izquierda ha dejado de ser eficaz. Aunque en un principio Juan Carlos I tenía esperanzas de mejorar su condición física, los especialistas han advertido que, con la edad, el deterioro del sistema musculoesquelético es inevitable. Esto ha llevado al emérito a replantearse nuevas alternativas para sobrellevar sus limitaciones.
La búsqueda de Juan Carlos I para mejorar la calidad de vida en sus últimos años
Fuentes cercanas al monarca aseguran que está explorando diversas opciones terapéuticas para mejorar su calidad de vida. Entre ellas, se mencionan terapias físicas avanzadas y tratamientos quirúrgicos más conservadores. El objetivo es aliviar las dificultades diarias que le genera su problema de movilidad, aunque cada vez resulta más complicado encontrar una solución efectiva.
Desde su retiro de la vida pública en 2019, Juan Carlos I ha mantenido un perfil discreto, pero ha contado con el constante apoyo de su hija, la infanta Elena. Ella ha sido su principal compañera en estos últimos años, visitándolo con frecuencia y convirtiéndose en su gran aliada en esta etapa de su vida.
Mientras el monarca emérito sigue buscando opciones para mejorar su estado de salud, también está poniendo en orden sus últimos deseos. Aunque su regreso a España sigue siendo una incógnita, lo cierto es que su futuro está más en el aire que nunca.
