La reina Isabel II falleció el 8 de septiembre de 2022, dejando desamparados a sus dos mascotas: dos perros de raza corgi, los cuales, según la princesa Michael de Kent debían “ser sacrificados”. Así lo afirmó la discreta royal en una entrevista en la cual se le preguntó qué pensaba de las mascotas.
De acuerdo con el diario británico The Express, la opinión de Michael de Kent fue tomada como una broma, por lo que el reino nunca permitió que se llevara a cabo el malvado deseo en contra de los amados canes de la reina.
¿Quién es la princesa Michael de Kent?
La princesa Michael de Kent es un miembro de la Familia Real británica como esposa del príncipe Miguel de Kent, nieto del rey Jorge V.
Nacida baronesa Marie-Christine Anna Agnes Hedwig Ida von Reibnitzes, la royal se convirtió en escritora y ha publicado varios libros sobre Familias Reales y Nobles de Europa. También organiza tertulias y giras de lectura en el Reino Unido. En ocasiones sociales especiales, el príncipe y la princesa de Kent representan al rey Carlos III.
De acuerdo con The Express, Michael de Kent es famosa por expresar abiertamente sus opiniones sobre la vida real. Ya sea comentando sobre la “horrible” decoración del Castillo de Windsor o tildando de “aburridos” a los miembros mayores de la realeza. “No oculta lo que piensa”, sentencia el medio citado.
La discreta royal tiene dos hijos: Lord Federico Windsor y Lady Gabriella Kingston.
¿Qué pasó con los perros de la reina Isabel II cuando murió?
Muick y Sandy son los nombres de los dos perros raza corgi que quedaron desamparados tras la muerte de Ia reina Isabel. Ambos fueron heredados a Sarah Ferguson, la ex esposa del príncipe Andrés, debido a que ella misma fue quien se encargó de obsequiar los animales a la reina.
A más de dos año del deceso de Isabel, Ferguson ha demostrado ser la indicada para llevar a cabo las labores de cuidado que se le encomendaron para mantener felices a los tiernos canes, pues además de otorgarles un hogar y darles los mantenimientos básicos, suele emplear cotidianamente un curioso ritual para que no olviden a su antigua dueña.
La también duquesa de York expresó en el programa Lorraine, del canal ITV, que siempre procura premiar a los canes con pequeños trozos de galletas digestivas, tal y como lo hacía Isabel.
Ferguson mencionó que los dos corgis suelen reaccionar felices, pues parecen evocar el recuerdo de las pequeñas manos de su anterior tutora, quien no desperdiciaba la oportunidad de mimarlos.
“Cuando yo lo hago, vienen corriendo porque la recuerdan, su nariz y sus pequeñas manos... ¡Era muy dulce! Así que yo mantengo vivo el ritual”, reveló Ferguson.
La duquesa de York suele tener algunos problemas con los corgis que Isabel II le heredó, pues los canes heredados tienen que convivir con los otros cinco perros que viven en el Royal Lodge. Sarah relató que los otros ejemplares caninos pertenecen a la raza norfolk terrier, por lo que, ocasionalmente, suelen tener inocentes peleas.