A lo largo de su corta pero prolífica carrera, la actriz Shailene Woodley ha tenido la oportunidad de rodearse de estrellas de la talla de George Clooney, Willem Dafoe, Eva Green o Joseph Gordon-Levitt. Sin embargo, hasta que la exitosa serie de la HBO Big Little Lies se cruzó en su camino nunca antes había sentido tanta admiración por alguno sus compañeros como lo hace ahora por Nicole Kidman y Reese Witherspoon. Es más, la joven se considera muy afortunada de poder compartir set de rodaje con unas mujeres que, según ella, llevan años cambiando por completo las normas del juego y allanando el camino para las nuevas generaciones. “Han transformado la industria para las mujeres y siguen haciéndolo para que actrices como yo misma o Zoë (Kravitz) podamos tener la libertad de expresarnos y desarrollarnos en un ambiente que no nos clasifique como una minoría o que devalúe nuestra valía por razones de género”, afirmó recientemente en una entrevista concedida a la revista Psychologies. Pese a los grandes avances que se han producido en los últimos años, la protagonista de Divergente se ve obligada a reconocer que todavía queda mucho más por conseguir en pos de la igualdad, como, por ejemplo, dejando de destacar que una producción con un reparto femenino como ‘BLL’ haya sido un éxito. “Basta de mencionar el género. La gente se refiere a Big Little Lies como ‘una serie protagonizada por cinco mujeres’, pero nunca decimos: ‘Han hecho una serie protagonizada por cinco hombres, qué bien’. Eso resume a la perfección el punto en que nos encontramos ahora. Yo quiero luchar para que algo así no se utilice como reclamo. Quiero que sea la norma, y lo será, pero todavía tenemos por delante mucho camino por recorrer”, explicó en otro momento de la conversación.
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