No es novedad decir que Kate Middleton encabeza la lista de las royals más ahorrativas, ya que ha demostrado que no tiene reparo en reciclar piezas de su guardarropa o usar prendas “low cost”. A lo largo de estos años también nos hemos dado cuenta que tiene algunas que son como un fetiche para ella, como las botas de Penelope Chilvers ,que tiene desde hace 14 años, o los pantalones pitillo de Zara que ha llevado en numerosas ocasiones, y con los que siempre se ve regia. Y esta noche, en la gala de los Tusk Conservation Awards en Londres, repitió hasta el último detalle de un estilismo de fiesta que llevó en 2012 al Royal Albert Hall: mismo vestido, mismos zapatos y mismo clutch. Lo único que variaron fueron el peinado y los pendientes. La duquesa de Cambridge lució nuevamente espectacular con un vestido azul, de Jenny Packham, que también hoy complementó con las mismas sandalias doradas de plataforma, de Jimmy Choo, modelo “Vamp”, que son perfectas para la noche. Y el pequeño bolso de mano iba a tono con el vestido. Por cierto, este calzado se lo ha puesto ya en unas cuantas ocasiones en estos últimos seis años también, también para acudir a fiestas, como 2012 lo lució en una cena de gala, en 2013 con un vestido recubierto de pedrería, en un evento de los BAFTA en 2014, en 2015 en un estreno de cine.
El cabello lo llevó suelto con ondas y con un poco más de volumen que de costumbre, también perfecto para la ocasión; y como joyas solamente llevó unos pendientes largos de diamantes.
Aunque han pasado seis años de que la vimos por primera vez con este look, el estilo de Kate es siempre impecable.
Por su lado, el príncipe William lució encantador vestido de esmoquin. Los duques de Cambridge llevaron la amapola que simboliza el Día del Recuerdo, que se celebra el 11 de noviembre. ¿Qué te parece el look de Kate?
