Hablar de Elie Saab es sinónimo de romanticismo y mucha elegancia. Sus pasarelas se llenan de propuestas ideales para una alfombra roja o para que las lleve alguna mujer de la realeza. La opulencia y el glamour siempre han sido parte de los majestuosos diseños del diseñador libanés, quien se dio a conocer por sus impecables bordados y entalladas siluetas que han hecho homenaje a la mujer durante años. Este miércoles, en su colección Haute Couture otoño-invierno 2018, llamadaOf Forms And Light , Saab deja a un lado la inspiración femenina para enfocar sus siluetas en el arquitecto catalán Antonio Gaudí. Elie Saab volvió al mismo escenario de su primer show en París, el Museo de las Artes Decorativas, para presentar una colección que surge de la profunda impronta que le ha dejado un viaje por Barcelona. La luz de la Ciudad Condal, sus curvas, sus formas y sus colores dan como resultado vestidos con estampados de mosaicos como recién sacados del mismo parque Güel de Gaudí. Sus clásicos diseños estructurados desaparecieron, dándole vida a las figuras con movimiento que representan las obras del arquitecto catalán. En esta nueva colección vimos a un Elie Saab diferente, mostrando estilizados cortes y construidas figuras, con su esencial dosis de bordados y brocados, pero en esta ocasión colocados estratégicamente en los costados. Los colores neutros, los olanes y los traje sastre fueron piezas claves en esta entrega acompañados del tul, sedas y satín. El giro que buscó darle el diseñador a su firma fue una agradable sorpresa con destellos de lo que caracteriza a Elie Saab. El diseñador logró de manera exitosa, crear glamorosas piezas sin perder de vista esa seguridad, sensualidad y feminidad que le otorga sus vestidos a la mujer de hoy.