Las uñas french se perfilan como un estilo básico de esta temporada, sobre todo en sus diferentes variaciones, sin embargo, hacer este tipo de mani en casa puede ser complicado, por eso te vamos a contar el secreto para que te queden igual que en el nail bar. Toma nota.
Hacer una manicura francesa en casa puede ser sencillo y divertido con un poco de práctica y los materiales adecuados. Estos son los pasos:
Preparar las uñas
- Remover el esmalte anterior: usa quitaesmalte y algodón para eliminar cualquier rastro de esmalte anterior.
- Limar y dar forma: lima para darles la forma deseada (cuadrada, redonda, almendrada, etc.).
- Empujar las cutículas: usa un palito de naranjo o un removedor de cutículas para empujar suavemente las cutículas hacia atrás.
Aplicar la base
- Usa una capa de base coat en cada uña y deja secar completamente. Esto protegerá tus uñas y ayudará a que el esmalte dure más tiempo.
El truco para que las uñas french queden perfectas
En este punto hacemos hincapié porque gran parte del éxito de tu mani depende de él:
- Usa cinta adhesiva o guías: coloca la cinta o las guías en la uña dejando expuesta solo la punta que quieres pintar de blanco. Asegúrate de que estén bien adheridas para evitar que el esmalte se filtre.
- Si tienes buen pulso, puedes pintar las puntas directamente con el pincel del esmalte blanco. Comienza desde un lado de la uña y sigue la curva natural de la punta.
- Si te sales de la línea, usa un palillo o un pincel pequeño con un poco de quitaesmalte para corregir los errores.
Aplicar el color principal
- Después de que el esmalte blanco se haya secado, aplica una capa de esmalte rosa pálido o beige sobre toda la uña, incluyendo la punta blanca. Deja secar completamente.
- Si es necesario, aplica una segunda capa para una cobertura más uniforme.
- Finalmente, aplica una capa de top coat en cada uña para sellar el esmalte y añadir brillo. Esto también ayudará a que tu manicura dure más tiempo.