La diseñadora pensó hasta en el lugar donde descansaría al morir...
Pocas personas saben que cuando murió Coco Chanel el 10 de enero de 1971, a los 87 años de edad, en la suite del hotel Ritz de París, donde vivía, ya había diseñado con todo detalle su propia tumba en la sección 9 del cementerio Bois-de-Vaux, en Lausanne, Suiza. Ahí fue enterrada de acuerdo con sus deseos.