El mes de mayo llega cargado de energía renovadora, no solo por la primavera que florece en el exterior, sino también por la influencia de la “Luna de Flores”, un fenómeno astronómico que coincide con la luna llena. Esta luna recibe su nombre por la abundancia de flores que brotan en esta época del año, simbolizando un nuevo comienzo, crecimiento y transformación.
¿Cuándo significa la luna de flores? La luna llena de mayo es un fenómeno astronómico que recibe su peculiar nombre por la coincidencia en el hemisferio norte con la época de primavera, cuando las plantas y árboles florecen. Para conocer más sobre este fenómeno astronómico y cómo sería posible aprovecharlo a su favor, consultamos a Mariana Chávez Rodríguez, psicoterapeuta psicoanalítica y cofundadora del Centro del Bienestar Integral.
¿Cuándo ocurrirá la Luna llena de Flores?
“Este 2024, la luna llena de mayo será el 23, y dicen los astrólogos que es el mejor momento para observar y expresar tus sentimientos más profundos, incluso aquellos que no nos gustan” comenta Mariana.
Como dato peculiar, en este mes, también ocurrirá dos lluvias de meteoros, que serán visibles desde el hemisferio norte: las Eta-Acuáridas alcanzarán su punto máximo de actividad la noche del 3 de mayo y las Eta-Líridas sucederán el 10 de mayo. Momento perfecto para ver estrellas fugaces.
Regresando a la luna llena de Flores. “Este nombre se lo dieron los nativos americanos, debido a que este fenómeno ocurría sobre todo en el hemisferio norte del planeta”, comenta la psicoterapeuta psicoanalítica. Aunque, en algunas culturas le dieron otros nombres relacionados con el florecimiento, como “Luna Morera”, “Luna de Floración de las Camas” o “Luna de las Hojas Verdes”.
Cómo aprovechar la temporada para florecer
Mariana nos hace reflexionar sobre la importancia de mirar y expresar nuestros sentimientos, aunque no siempre nos gusten. Esto tiene un objetivo claro: tomar el control de estos y renacer como las flores.
En ocasiones, experimentamos emociones que nos incomodan y tratamos de ocultarlas por temor a ser juzgados o por vergüenza. Sin embargo, reprimir lo que sentimos no lo hace desaparecer, sino que lo convierte en una bomba de tiempo que tarde o temprano explotará, manifestándose a través de palabras, actitudes o acciones inadecuadas, intensificando la culpa y el malestar.
Un camino hacia la sanación
Paso a paso, descubre cómo puede transformar las emociones no deseadas en una oportunidad de crecimiento:
- Aceptación sin juicio: El primer paso es aceptar sin juzgarte que estás experimentando estas emociones. Negarlas solo las empeora. Decirlas en voz alta, ya sea en privado o en terapia, te ayudará a liberar una gran carga.
- Comprensión del origen: Reflexiona sobre el origen de estas emociones. ¿Qué las desencadena? ¿Te recuerdan a experiencias pasadas o a personas que te han lastimado? Identificar el origen te ayudará a comprenderlas mejor.
- Liberación de la culpa: Al comprender el origen de tus emociones, podrás liberarte de la culpa por sentirlas. Recuerda que no eres culpable de tus emociones, sino de cómo eliges reaccionar ante ellas.
- Toma el control: Una vez que comprendes y aceptas tus emociones, puedes tomar el control de tu reacción. En lugar de actuar de forma impulsiva, puedes elegir una respuesta más moderada y constructiva.
- Sanación y crecimiento: Al aceptar y comprender tus emociones, estás abriendo la puerta a la sanación. A través de la terapia emocional, puedes aprender a perdonar a quienes te han lastimado y, lo más importante, perdonarte a ti mismo.
Toma en cuenta la reflexión de Mariana: “Para que una planta florezca tiene que pasar por un importante proceso. Y la Luna de flores es el momento ideal para comenzar a trabajar contigo para que cada día florezcas en tu mejor versión”.
Mayo, con la influencia de la “Luna de Flores”, nos brinda una oportunidad única para florecer y brillar con nuestra mejor versión. Recuerda que el crecimiento personal es un proceso continuo que requiere dedicación y esfuerzo. No es magia, es trabajo personal.
Con ayuda de Mariana Chávez Rodríguez, psicoterapeuta psicoanalítica, cofundadora del Centro del Bienestar Integral