El término divorcio de camas puede sonar alarmante, en realidad se trata de una práctica que cada vez gana más adeptos y reconocimiento entre expertos en salud y relaciones amorosas. Este fenómeno consiste en que tú y tu pareja duerman en camas separadas, o incluso en habitaciones diferentes, con el objetivo de mejorar la calidad del sueño y, por ende, la relación. A continuación, exploramos los estudios y beneficios respaldados por la ciencia sobre esta práctica.
¿Qué es el divorcio de camas?
Esto no significa el fin de la relación (a menos que esa sea la intención), sino una adaptación para mejorar el bienestar de ambos miembros de la pareja. Según un estudio publicado en el Journal of Clinical Sleep Medicine, entre el 30 y 40% de las parejas han optado por dormir en camas separadas en Estados Unidos. ¿La razón? Esta práctica está motivada por diversos factores, como el ronquido, diferentes horarios de sueño, inquietudes nocturnas, o simplemente la necesidad de un espacio personal para descansar mejor.
Beneficios del divorcio de camas
El divorcio de camas es una práctica que puede traer múltiples beneficios para la vida en pareja y esto es lo que dicen los expertos al respecto.
Ayuda a mejorar la calidad del sueño
Un estudio del Centro de Sueño de la Clínica Mayo reveló que más del 25% de las parejas que duermen juntas experimentan trastornos del sueño debido a las actividades del compañero de cama, como el ronquido o el movimiento. Dormir en camas separadas permite a cada persona tener un sueño ininterrumpido y reparador, lo cual es crucial para la salud física y mental.
Reducción del estrés y la irritabilidad
La falta de sueño puede aumentar los niveles de estrés y causar irritabilidad. Dr. Wendy Troxel, psicóloga y experta en sueño, señala que dormir mal afecta directamente a nuestra capacidad de manejar el estrés y las emociones. El divorcio de camas puede reducir los conflictos relacionados con el mal dormir y mejorar la dinámica de la relación.
Fortalecimiento de la relación
Aunque puede parecer contradictorio, dormir separados puede fortalecer la relación. Un estudio realizado por el Departamento de Psicología de la Universidad de California encontró que las parejas que duermen en camas separadas reportan niveles más altos de satisfacción en la relación. Esto se debe a que ambos miembros están mejor descansados y, por lo tanto, más dispuestos a comunicarse y resolver conflictos de manera efectiva.
