Entre las suculentas que atraen la buena suerte se encuentra la afamada planta árbol de jade cuyo significado es muy especial y sus cuidados no son tan costosos como se creería.
Qué es la planta árbol de jade
Es una suculenta distintiva por su forma de pequeño árbol, conocido por el nombre formal Crassula ovata, originaria de Sudáfrica y una de las primeras plantas que se introdujeron en Europa.
La planta de jade tiene hojas ovaladas o tubulares con mucho brillo, color verde cobrizo o jaspeado, y tallos gruesos y maderosos que parecen pequeños troncos de árbol. Puede crecer de 3 a 6 pies de alto, pero solo aumenta dos pulgadas cada año —si haces que crezca pequeño, puede ser el perfecto aditamento a tus plantas de interiores.
¿Qué significa tener una planta de jade en casa?
La planta de jade significa planta de dinero o planta de la buena suerte. En muchas culturas asiáticas la consideran una planta de prosperidad y amistad.
En el feng shui recomiendan tener una planta de jade en la puerta de entrada de tu casa para darle la bienvenida al dinero —¡considéralas como regalo para cuando vayas de visita a un nuevo hogar!
Cuidados de la planta de jade y dónde colocarla en la casa
En cuanto a iluminación, la planta de jade crece mucho mejor en un ambiente mixto, donde puede recibir luz de sol tanto directa como indirectamente; con esto obtendrá mejor color del follaje y crecerá más sana.
Puedes darle de 4-6 horas de sol, y si las tienes dentro de casa colócalas cerca de una ventana que reciba al menos estas horas de luz al día. También es tolerante a los niveles bajos de luz solar, pero evita dejarlas en estas condiciones por mucho tiempo porque puede debilitarla.
Cada cuánto debes regar la planta de jade depende un poco de la época, pues durante primavera y verano debes regarla más seguido pero evitando que el suelo se mantenga demasiado mojado. Y en invierno requiere menos agua ya que la evaporación del agua es menor y se conserva mejor.
Como es una suculenta, aguanta periodis largos sin agua, y debes prestar atención a los signos de que está sedienta: las hojas se caen o pierden color, o aparecen manchas café en las hojas.
La cantidad de agua es igual a regarla hasta que empiece a gotear la base de la maceta, de esta forma podrás asegurar que tu planta está humedeciendo lo suficiente las raíces. Antes de volverla a regar, y para no ahogarla, revisa que la tierra esté seca en las primeras dos pulgadas de profundidad (de ser así, procede a echarle agua).
Nunca mojes las hojas de tu planta de jade, pues esto las hace propensas a agarrar bacterias e infecciones. Solo debes mojar el suelo para las raíces.
