No solo es para tomar y despertar por las mañanas, el café también tiene maravillosas propiedades para las plantas y tu jardín, y para aprovecharlas, te decimos cómo usar el café como abono para plantas.
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Beneficios del café para las plantas
Antes de tirar los granos de café que quedan en la cafetera, tienes que saber que estas sobras son perfectas para hacer que tus plantas se mantengan fuertes y protegidas de plagas y parásitos del ambiente.
Además es rico en riboflavina (vitamina B2), ácido pantoténico (B5) y minerales como el manganeso, potasio, niacina y magnesio, y que diferencia de los fertilizantes sintéticos, estos nutrientes orgánicos se van absorbiendo poco a poco por las plantas, por lo que aprovechan mejor los nutrientes. Estos son sus beneficios:
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- Mejora la acción de la composta.
- También ayuda a controlar diversas plagas.
- Es un excelente abono.
- Además, nutre el suelo, haciéndolo más fértil.
- Finalmente, elimina hongos dañinos que impiden el crecimiento.
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Cómo no debes usar el café en las plantas
Lo primero que debes saber, es que nunca debes poner café sin usar en las plantas, es decir, directo del sobre, pues es demasiado ácido y podría afectar de manera negativa a la salud de las plantas.
Cuando los granos de café ya han sido utilizados para hacer la bebida, se neutraliza el PH, y es cuando pueden utilizarse como abono para las plantas; sin embargo, debe estar completamente seco, para evitar que se desarrollen hongos.
Otro dato importante, es que no se debe utilizar en plantas que han sido trasplantadas hace poco tiempo, se recomienda utilizarlo en plantas adultas.
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¿Cómo se utiliza el café como abono para plantas?
- Recupera las sobras de café de tu olla o cafetera.
- En una bandeja, coloca las sobras de café y déjalas secar al sol. También puedes colocar una hoja de periódico sobre la bandeja y luego colocar el café, la hoja se encargará de absorber la humedad.
- Déjalos secar (este procedimiento puede tardar varios días) y, cuando estén secos, separa los residuos de café y riégalos sobre la tierra de tus plantas (forma una capa ligera que cubra toda la maceta).
- Finalmente, repite este procedimiento 1 vez al mes.
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