Gastronomía afrodisiaca para San Valentín

Gastronomía afrodisiaca para San Valentín

Evita el alcohol en grandes cantidades, las comidas copiosas y apuesta por comer sensualmente, con las manos. Estas son algunas de las claves para que el Día del Amor termine en éxito

happy couple in restaurant or dinner
European Stock Collection - October 02, 2010
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European Stock Collection - August 07, 2007
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Ginger fresh and dried in wooden spoons
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El plátano, otro de los grandes protagonistas de las cenas del Día de los Enamorados por su insinuante forma, también debido a su alto contenido en potasio hace que el cuerpo se relaje. Pero esto, según Enrich, también tiene una lectura positiva al evitar que te den calambres si llevas muchas noches haciendo el amor.

European Stock Collection - July 21, 2009
European Stock Collection - May 07, 2009
Cuisine of Spain
Young attractive woman eating chocolate

En cuanto a etapas históricas, fue la Edad Media la peor época para la gastronomía afrodisiaca y se llegó a prohibir el cultivo del apio por la forma propia del producto que recordaba la del aparato sexual masculino.

La historia ha dejado escritas mil páginas de amor, pero, sin duda, el amante más célebre fue Giacomo Girolamo Casanova, quien no sólo disfrutaba con la conquista, sino que hacía de casamentera para muchas de sus agradecidas amantes. Casanova se hacía unas tortillas increíbles con muchos ingredientes para recuperarse rápido de toda la noche amatoria, cuenta Rosa Pérez.

Otro ejemplo de personaje histórico que dio importancia a la cocina fue Catalina de Médicis, la italiana que llegó a la corte de Francia en el siglo XV y aportó la alcachofa a la gastronomía francesa. Esta planta tiene un gran poder afrodisiaco debido a su alto porcentaje de sulfuro, que hace que se produzca una vasodilatación, y ésta a su vez provoca cierta excitación.

Y de Madame de Pompadour, amante, amiga y consejera de Luis XV, también se conoce que era frígida, y el rey, gran amante de la gastronomía, mandó hacer una cocina privada en Versalles donde le cocinó muchos platos con trufa con el fin de conseguir una noche de pasión con su amada. De nada sirvió, y Madame Pompadour al final optó por buscar jóvenes amantes para su rey y así no tener que rendir cuentas en la cama.

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