Desde recién nacidos, ellos sienten el amor alrededor de su familia
Desde que un niño nace, saberse querido es esencial para su desarrollo. Que su llegada al mundo sea motivo de felicidad para sus padres, que una más a las familias de ambos y que motive que todos se comuniquen en armonía son señales que el pequeño captará a medida que crezca.
Esas expresiones de amor serán como una red de sostén emocional y espiritual que lo “alimentará" a lo largo de su vida.