La meditación es una práctica milenaria, la cual trae toda una serie de beneficios para la salud, tanto física como mental, debido al poder que tiene para la inducción a un estado de conexión profunda entre las emociones y cada una de las partes del cuerpo, así como con el presente que nos rodea.
Por tales causas y por ser un gran aliado para relajación espiritual, la meditación no debería dejar de ser considerada como todo un imprescindible de la rutina diaria, siempre y cuando se practique de manera eficiente, a partir de la alianza con varias técnicas que pueden ayudar a potenciar sus efectos en mucho menos tiempo del que normalmente se invierte en su práctica.
La respiración profunda y consciente, la repetición de mantras y la mirada desde el exterior son algunas de las técnicas más poderosas para inducir un estado profundo de meditación. Sin embargo, otra designación poco conocida y que tiene prácticamente la misma efectividad que las anteriormente mencionadas son los “mudras”, los cuales a pesar de ser todo un símbolo de esta disciplina, pocas personas conocen cómo implementarlos.
¿Qué son los mudras?
Los mudras es un lenguaje de signos, también comúnmente utilizado en la práctica del yoga, siendo un medio de comunicación no verbal que dirige mensajes al cuerpo y a la mente, utilizando principalmente las manos.
La lógica de los mudras se basa en la colocación estratégica del dorso, palmas y dedos de las manos, con el fin de crear conexiones con algunos órganos físicos y con las diferentes emociones.
Los mudras se pueden realizar con una mano, Asamyutha Mudras, o con las dos manos, Samyutha Mudras. En ellos, la mano izquierda representa la Luna y está controlada por el lado derecho del cerebro, mientras que el lado izquierdo del cerebro controla la mano derecha, que representa el Sol.
El significado de los dedos de las manos, según el principio de los mudras
Tomando en cuenta que cada una de las partes del cuerpo representa un punto energético y que cada uno de los movimientos y posiciones de las manos puede tener una influencia directa sobre otra de las partes que guían nuestro funcionamiento corporal, debes considerar los siguientes significados en tus manos para llevar a cabo de manera correcta los diferentes mudras en la meditación:
- El pulgar simboliza el fuego y conecta con la energía universal y la conciencia, es decir, con el “Yo Superior” y nuestra esencia. La energía del tórax llega hasta la mano, que se conecta con el pulmón en este dedo, representando la claridad de pensamiento y, en desequilibrio, la tristeza y la melancolía.
- El índice representa al planeta Júpiter y al aire, el cual, en el plano mental, otorga poder y control al pensamiento, intuición, sabiduría y equilibra el estado de ánimo. De acuerdo a la posición de estos debos, encontraremos control el meridiano del colon y, en el terreno de las emociones podremos lograr un equilibrio con la calma, la pureza y el apego, dejando atrás la avaricia y dominancia en desequilibrio.
- El dedo medio es el planeta Saturno y simboliza el elemento éter o Akasha, relacionado con el firmamento y con nuestra capacidad de actuar con la vida en armonía y sinceridad.
- El anular es el planeta Sol, relacionado con la vitalidad, la alegría, la fuerza y el elemento Tierra y simboliza las relaciones afectivas, familiares, amorosas.
- Por último, el meñique simboliza el elemento agua y se representa por el planeta Mercurio. Está relacionado con el órgano corazón y, en las emociones, con la sinceridad en la comunicación con uno mismo, en la decisión clara, y en la buena salud en general.
