Gracias por tanto, mamá
La maternidad en soltería ha sido criticada durante muchos años. Las madres solteras han tenido que tolerar los juicios y discriminación por ser cabezas de familias uniparentales.
Incluso, los hijos e hijas de madres solteras tienen que acoplarse a los juicios por no tener una figura paterna.
No obstante, aunque mucha gente pueda pensar que los hijos de madres solteras tienen carencias, es todo lo contrario.
Hicimos una recopilación de lecciones que asimilas al crecer en una familia uniparental.
Comprendes que no se necesita un hombre para llevar un hogar
La mayoría de la sociedad no puede imaginarse una familia o un hogar sin que haya una presencia masculina. Al crecer sin padre, aprendes que no es necesario un hombre para guiar una familia o, simplemente, para ser feliz.
No creces pensando que las mujeres son débiles
Tu madre es tu mejor ejemplo. Ella te enseñó que el género sexual no significa nada para cumplir tus sueños o para realizar cualquier actividad.
Además, eres más independiente y aprendes a hacer las cosas por ti misma.
No viste peleas de pareja
Esto no significa que todas las parejas pelean a gritos frente a sus hijos, pero al estar en pareja, es común que existan algunas rencillas a la hora de llegar a acuerdos.
Como hijo o hija de madre soltera, nunca viste una pelea de pareja y sabes que no hay ninguna necesidad de gritar por problemas.
Los hijos hombres son mejores parejas
A pesar de haber crecido sin ver cómo un hombre debería comportarse con una mujer, los hijos aprendieron, por lo que les enseñó su mamá, cuál es la forma correcta de conllevar una relación.
Además están conscientes de que los vínculos en un noviazgo deben ser justos.
Como conclusión, no importa el tipo de familia al que pertenezcas; lo principal siempre será que disfrutes y ames a tus seres queridos.
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