Toda dieta moderna incluye pescado, soya y sus derivados, al ofrecer grandes beneficios y ser una excelente fuente de proteínas que ayudan a bajar el colesterol.
- EDAMAMES
Son deliciosas como bocadillos, ya sean cocidas al vapor o hervidas con un poco de sal. De acuerdo con los nutricionistas, “nos hacen sentir que estamos ingiriendo mucho más de lo que en realidad consumimos”, todo gracias a la presión que se ejerce con los dientes para sacar los frijolitos de las vainas.
- LECHE DE SOYA
La gran ventaja de este tipo de leche o las bebidas con soya es que no contienen lactosa y mejoran el perfil lipídico. Por algo es conocida como la mejor semilla.
- TOFU
Hecho de leche de soya, es muy versátil. Media taza contiene 94 calorías y es ideal para sustituir carne o pollo en platos salteados en el wok o en guisos, ya que absorbe el sabor de las salsas, especias o caldos. Te interesa: Menú vegano: bolitas de tofu, ¡aprende a hacerlas!
- PESCADO
Básico en las dietas asiáticas (en especial atún, salmón y pescados azules), pues es el alimento con el que más rápido se pierde peso por sus ácidos grasos omega-3, que disminuyen la leptina que ‘guarda’ la grasa en el cuerpo. ¿Sabías que...? Un reporte que apareció en Archives of Dermatology, una publicación estadounidense, reveló que comer tres raciones a la semana de pescados ricos en ácidos grasos Omega-3 ayuda a controlar la inflamación que causan los brotes de acné. ¡El salmón y el atún son dos “herramientas” más para ayudarte a mantener una piel lozana y saludable!
- Miso
Es un condimento a base de arroz, cebada, frijoles de soya fermentados y hongo kōjikin. ¿El resultado? Una pasta ideal para salsas, marinar o curar vegetales, carnes o pescados. Tiene pocas calorías y es rico en vitaminas y minerales, aunque es muy salado.
