En los espacios de la casa predomina una sensación de renacer, tanto por los detalles como por la iluminación
La sencillez y la luminosidad definen esta casa en la que el color blanco prevalece en los gabinetes, en la pared y en algunos muebles de la cocina-comedor, haciendo que todo se vea con más claridad. Las paredes pintadas de blanco combinan muy bien con los pisos terminados con triple resina de color gris.
Las plantas están en tiestos grandes y pequeños, típicos e inusuales como un tronco de madera colocado cerca del sofá. Entre todos forman una novedosa manera de diseñar, con un sello muy personal, porque en la selección de las plantas cada quien refleja sus preferencias individuales y la forma sui géneris de darle un toque especial al hogar. La escalera junto a la pared es decorativa y funcional: en ella se cuelgan algunos periódicos.
La naturaleza reina a lo largo de la pared del fondo que va desde la sala hasta el dormitorio matrimonial. En ese ?jardín interior? de corte lineal encontramos diversas plantas: desde las hiedras y los cactus hasta los helechos y las violetas africanas. En el dormitorio continúa el ?jardín interior?. Hay una manera ingeniosa de colocar los cuadros: apoyados en la pared.
Las losas de vidrio en las paredes y el piso facilitan el mantenimiento del baño.
¡Un rincón muy agradable! La pared verde armoniza con el color de las plantas, haciendo que los estantes blancos resalten de una forma más intensa, y las sillas con la alfombra de área.