¿Cuál es la mejor leche para ti?

Entera, deslactosada o de soya... Existen distintos tipos de leche con grandes ventajas, pero, ¿cuál es la más indicada para cada persona? Descubre cuál debes consumir

Entera: Tiene un alto valor nutritivo, ideal para los niños y los jóvenes. Este tipo de leche también es buena para las mujeres que se ejercitan constantemente o que estén embarazadas, ya que aporta el calcio necesario para mantener los huesos y músculos saludables. La leche entera contiene 146 calorías por vaso y 7,9 gramos de grasa. Si la leche entera te hace sentir inflamada o te descompone el estómago, entonces una opción para ti es la leche deslactosada. A esta variedad le extraen la lactosa, la causante de que muchos sean intolerantes a este alimento. Esta leche es fácil de digerir y contiene la misma proporción de grasa que la entera (una buena opción es la deslactosada light, para bajar el nivel de grasa). Light: Sólo contiene 5 gramos de grasa y proporciona la mitad de calorías, por lo que es una buena opción para reducir grasa corporal.

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También existe la alternativa vegetal en leches

Éstas son para quienes padecen problemas digestivos, como estreñimiento, diarrea, colon irritable y otros padecimientos. Leche de almendras. Es deliciosa y su cantidad de proteína la hace idónea para sustituir las proteínas de origen animal, además es rica en ácido linoleico y oleico, importantes para el sistema cardiovascular. Tiene gran cantidad en minerales, calcio y fósforo, por lo que se recomienda para todas las edades. Su alto porcentaje de fibra ayuda a proteger la pared intestinal, sobre todo a nivel del colon y regula la velocidad de absorción de azúcares y colesterol. Leche de coco. Muchas consideran a este alimento como milagroso , ya que ayuda a proteger el organismo y a curarlo de múltiples afecciones. Un vaso de esta leche posee un cuarto del requerimiento diario de hierro. Es rica en magnesio, por lo que ayuda a aliviar calambres y dolores musculares. Contiene una alta concentración de fibra, por lo que puede ser ingerida en las dietas. La leche de coco también es rica en selenio, un importante antioxidante que controla los radicales libres, y ayuda a aliviar los síntomas de artritis. Por su contenido en potasio, reduce los niveles de presión arterial, y aunque no es rica en calcio, pero sí en fósforo, es ideal para fortalecer los huesos. Leche de avellanas. Es un excelente complemento en la alimentación diaria para cualquier edad y para las mujeres embarazadas por su alto contenido en ácido fólico, fibra y es baja en sodio. Además, estimula el intestino, previene el estreñimiento y ayuda a la absorción de grasas y azúcares. También disminuye los niveles de colesterol malo y triglicéridos. Leche de arroz. Es ideal para momentos de indigestión, vómitos y diarreas, por lo que es completamente digerible. También es buena para los deportistas, vegetarianos y para quienes buscan bajar de peso, ya que contiene muy bajos niveles de grasas y, en cambio, altas concentraciones de nutrientes. Se destaca su valor energético que aporta a través de su rico contenido en carbohidratos, así como la ausencia de colesterol y lactosa. Leche de semilla de calabaza. Es de gran ayuda en caso de parásitos y problemas de próstata. Su aporte de zinc y ácidos grasos ayudan a fortalecer el sistema inmunitario y cardiovascular. Además, es buena para nutrir la piel. Leche de soya. Esta es equiparable, en el contenido de proteínas, a la leche de vaca; pero la proporción de calorías es menor. Es ideal para quienes están a dieta o requieren menos calorías por su baja actividad física. Al ser de origen vegetal, la leche de soya es falta de proteínas que tiene la de vaca; por esto, es recomendable acudir a un especialista para que recete algún suplemento que balancee la dieta.

Por: Redacción Vanidades
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