Con un nuevo estudio, comprueban que las tradiciones sí han cambiado
Si eres de los que ya se subió a la ola de conocer las grandes historias de amor (ojalá verdaderas y duraderas) y estás planeando tu agenda para asistir a las bodas que las personas más cercanas a ti están celebrando, llega una noticia que revolucionará la forma en que tú piensas.
De acuerdo a un nuevo estudio realizado por el Journal of Family Psychology, el tema de contraer matrimonio, celebrar una boda y convertirse en una pareja casada no siempre lleva a la felicidad absoluta.
En el más reciente análisis, investigadores invitaron a 8,700 personas nacidas entre el año de 1980 y 1984, y descubrieron una gran diferencia de emociones entre los diferentes individuos (algunos quienes estaban casados y otros no).
En los resultados se reveló que la mayoría de las personas analizadas vivía más felices cuando no estaban casadas y viviendo o compartiendo su vida con otra persona. Es decir, viviendo juntos y sin el compromiso matrimonial.
Según Claire Kamp Dush, co-autora del nuevo estudio, el balance emocional, o sea, con una mayor cantidad de instantes felices y libres de estrés, se mostró en las personas disfrutando de una relación romántica pero fuera del matrimonio.