Simone Biles acaba de ganar su quinta medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París, la gimnasta ha brillado en el firmamento del deporte mundial no solo por sus increíbles logros gimnásticos, sino también por su valiente defensa de la salud mental. Aquí las lecciones por las que su historia cobra importancia mundial.
A los 27 años, una edad en la que muchas gimnastas ya se han retirado, Biles nos muestra su increíble capacidad de adaptación y su deseo de seguir superando límites, regresando al deporte con una perspectiva renovada.
Empatada con Shannon Miller como la gimnasta estadounidense más condecorada en la historia olímpica: “Biles vino a estos Juegos Olímpicos para satisfacerse a sí misma . Lo ha dicho en repetidas ocasiones. Ponerlo todo sobre la mesa... Estos Juegos Olímpicos son su oportunidad de competir por las razones correctas, en lugar de satisfacer a los demás”, apunta de manera certera The New York Times.
Lecciones sobre salud mental
Más allá de sus ocho medallas, Simone Biles ha sido una figura fundamental en la promoción de la concienciación sobre la salud mental en el deporte, influyendo en la forma en que los atletas abordan su bienestar. Con su triunfal regreso, aprendimos:
- Priorizar la salud mental: La decisión de la gimnasta de retirarse de la pasada edición de los Juegos Olímpicos para centrarse en su propio bienestar nos ayuda a reconcer la importancia del autocuidado. Este acto sirve como un recordatorio de que priorizar tu salud no es un signo de debilidad, sino más bien una demostración de fortaleza y resiliencia.
- Normalizar las conversaciones sobre salud mental: La atleta ha sido abierta sobre sus luchas, particularmente durante los Juegos Olímpicos de Tokio cuando experimentó los “twisties”, un bloqueo mental que afectó su desempeño. Su sinceridad resalta la necesidad de normalizar las conversaciones en torno a los problemas que “no se ven”. La creación de entornos seguros donde las personas se sientan cómodas para compartir sus desafíos es crucial.
- Reconocer las necesidades individuales: La experiencia de Simone enfatiza que las necesidades de estar bien por dentro y por fuera pueden varían de persona a persona. Es fundamental reconocer y respetar estas diferencias. Y esto no sólo aplica en el deporte, no sólo competimos por una medalla, luchamos en todos los entornos.
- Liderazgo con el ejemplo: Como atleta de alto perfil, Biles es un poderoso ejemplo para otros, incluidos educadores y entrenadores. Al priorizarse (a ella misma) y abogar por el diálogo abierto, inspira a otros a hacer lo mismo.
- Desarrollar la resiliencia: Para algunos, aprender a lidiar con la incomodidad y superar los desafíos puede ser crucial para el crecimiento personal. Lograr un equilibrio entre tomar descansos y desafiarse a sí mismo es vital para el desarrollo de la salud mental.
¿Dónde se puede ver el documental de Simone Biles?
Si quieres ver el documental “Simone Biles vuelve a volar”, donde se muestra la intensa preparación de la gimnasta para los Juegos Olímpicos de París 2024 y su batalla por mantenerse en equilibrio en la vida real mientras equilibra su vida personal, debes tener una suscripción a Netflix, ya que es la única plataforma donde está disponible.
El documental nos ofrece una mirada íntima a la vida de Biles, donde revela los desafíos que ha enfrentado como atleta de alto rendimiento, incluyendo los problemas de salud mental que la llevaron a tomar una pausa durante los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y cómo ha logrado superarlos.
Dividido en dos capítulos, el documental va más allá de la gimnasia, explorando la vida personal de Biles, actualmente casada con Jonathan Owens, y el impacto de su fama, ofreciendo una perspectiva integral de su trayectoria.
La historia de Simone Biles nos muestra que incluso las personas más exitosas y aparentemente invulnerables pueden enfrentar desafíos de salud mental. Su valentía al hablar abiertamente sobre sus luchas ha ayudado a desestigmatizar estos problemas y a fomentar una conversación más abierta sobre el bienestar emocional.
