Su historia, marcada por el éxito, está profundamente arraigada en su herencia mexicana raíces. Lynda Carter es hija de Juana Córdova, una mujer originaria de Chihuahua, México, que emigró a los Estados Unidos. A pesar de los desafíos y tragedias que ha enfrentado, como su lucha contra el alcoholismo o la pérdida de su esposo, la actriz se ha convertido en un símbolo de empoderamiento femenino y esperanza para muchas personas.
Los orígenes mexicanos de Lynda Carter
Hace 73 años, Lynda Carter nació en Phoenix, Arizona, Estados Unidos. Su madre, Juana Córdova, nació en Chihuahua, México. Ella era migrante y fue una mujer luchadora que le transmitió su carácter a sus hijos: Vincent, un desarrollador inmobiliario; Pamela, una ministra ordenada y propietaria de un negocio; y Lynda.
La propia actriz llegó a contar: “Oh, puedes hacer cualquier cosa que te propongas. Nosotras, las mujeres, estábamos en las fábricas y hacíamos todos esos trabajos que siempre nos decían que no podíamos hacer. Y cuando nos necesitaban, ahí estábamos”, comentó en entrevista.
Respecto a su padre, Colby Waren Carter, en su obituario se cuenta que poseía un gran carisma y don de gente, una de sus frases favoritas era: “si no puedes decir algo bueno sobre alguien, no digas nada en absoluto”.
Y por si tenían dudas, Carter habla español con fluidez.
Los inicios de la “Mujer Maravilla”
El camino de Lynda hacia la fama comenzó mucho antes de su icónico papel como la Mujer Maravilla. Desde joven, esta talentosa artista participó en concursos de belleza. De hecho, a los 20 años, ganó el título Miss USA en 1972, y llegó a ser semifinalista en el certamen de Miss Mundo.
Nueva York, la ciudad de los sueños, fue el escenario donde Carter comenzó a dar sus primeros pasos en la actuación. Con una versatilidad sorprendente, incursionó en la televisión con papeles en series como Nakia (1974) y Starsky y Hutch (1976), demostrando su capacidad para adaptarse a diferentes roles. Su debut en la pantalla grande ocurrió con Bobbie Jo and the Outlaw (1976), pero su éxito llegó con Wonder Woman (1975).
Un amor que terminó en tragedia
La vida de Carter ha estado marcada por relaciones significativas. Su primer matrimonio con Ron Samuels, su agente, fue el inicio de un capítulo que, aunque breve, formó parte de su historia. Sin embargo, fue su unión con Robert A. Altman, un destacado abogado y cofundador de ZeniMax Media, la que definiría su vida durante más de tres décadas. Con él tuvo dos hijos.
Pero su historia de amor tuvo altibajos. A inicios de los 90, Altman fue acusado de cometer fraude bancario, entre otros delitos, por el Banco de Crédito y Comercio Internacional (BCCI). A lo largo del juicio, el apoyo de su esposa fue incondicional. Fue a finales de 1993, cuando un jurado neoyorquino lo declaró inocente. El proceso no solo tuvo repercusiones legales, también impactó profundamente la vida personal y profesional de la actriz. El estrés y la ansiedad acumulados la llevaron a abusar del alcohol, adicción contra la que luchó con valentía y determinación.
En 2021, cuando tenía 73 años, Altman falleció a causa de mielofibrosis, un tipo raro de cáncer de sangre que afecta la médula ósea y puede llevar a complicaciones graves. Tras la noticia de su muerte, la actriz mencionó: “No sé quién soy sin él”.