El pasado miércoles 19 de febrero el Vaticano informó que el papa Francisco sigue en una situación clínica “compleja” debido a la neumonía bilateral que padece. Hoy por la mañana, en una conferencia de prensa el médico del pontífice, Sergio Alfieri, actualizó la información sobre el caso y dejó claro que el Santo Padre aún no está “fuera de peligro”.
En ese contexto es donde surgen teorías acerca de cuáles son los protocolos que tendrían que seguir en caso de que el Papa falleciera y, más allá del cónclave que tendría que suceder para definir quién quedaría al frente de la Iglesia, ha llamado la atención el deseo del pontífice de ser enterrado en la basílica romana de Santa María la Mayor, en Roma, Italia.
Así lo ha expresado el propio Papa Francisco, quien desea ir en contra de la tradición, la cual dicta que todos los líderes de la Iglesia católica deben ser enterrados en las grutas del Vaticano.
Jorge Mario Bergoglio ha llegado a expresar en entrevistas que su petición de ser enterrado en la basílica romana de Santa María la Mayor se basa en su deseo de querer estar cerca de su ícono favorito de la Virgen.
El Papa Francisco, de 88 años, también expresó el año pasado que no pensaba en dimitir a pesar de una serie de problemas de salud.
¿Cómo es la Basílica Romana de Santa María la Mayor, donde quiere ser enterrado el Papa Francisco?
Tal y cómo lo describe el Vaticano, la Basílica Papal de Santa María la Mayor domina la ciudad de Roma desde hace dieciséis siglos: el templo mariano por excelencia y cuna de la civilización artística. Situada en la cima del monte Esquilino, es una de las cuatro basílicas papales de Roma.
Según la tradición, la Virgen indicó e inspiró la construcción de su casa en el Esquilino. Apareciéndose en sueños al patricio Juan y al Papa Liberio, pidió la construcción de una iglesia en su honor, en un lugar que indicaría milagrosamente.
La Basílica alberga el icono mariano más importante, la Salus Populi Romani. La tradición atribuye la imagen a San Lucas, evangelista y patrón de los pintores. El Papa Francisco pone sus viajes apostólicos bajo la protección de la Salus, a quien suele visitar antes de su partida y después de su regreso.
El papa Francisco I no sería el primero en ser enterrado en este lugar, pues en la Basílica están enterrados siete Papas.
¿Qué se sabe sobre la salud del Papa Francisco?
El pasado 20 de febrero, la Oficina de Prensa de la Santa Sede informó que la salud del Papa está “ligeramente mejor”. Asimismo aseguró que el pontífice “se encuentra afebril y los parámetros hemodinámicos continúan estables”.
“Las condiciones clínicas del Santo Padre presentan una leve mejoría. Se encuentra afebril y sus parámetros hemodinámicos continúan estables. Esta mañana ha recibido la Eucaristía y, posteriormente, se ha dedicado a sus actividades laborales”, informó el Vaticano en un comunicado.
Recordemos que el Papa se encuentra internado en el hospital Gemelli de Roma, desde el 14 de febrero, donde fue diagnosticado con un brote de neumonía bilateral. Se informa que el máximo representante de la Iglesia sigue respirando de forma independiente y su corazón “se mantiene bien”.
Tomando en cuenta las actualizaciones dadas por la Santa Sede, también es preciso recalcar que la situación clínica del Papa Francisco sigue siendo “compleja”.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede informó el miércoles por la tarde que “los análisis de sangre, evaluados por el personal médico, muestran una ligera mejoría, en particular de los índices inflamatorios”.
La misma fuente señaló que después del desayuno, el Papa leyó algunos periódicos y luego realizó su trabajo con sus colaboradores más cercanos y que antes del almuerzo recibió la Eucaristía.
Por la tarde del miércoles, el Papa Francisco recibió la visita de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, con quien pasó 20 minutos en privado, asegura Vaticano News.