Los macarrones con queso han traspasado fronteras, y en la actualidad encontramos recetas con variaciones que incluyen salsas de quesos azul, de cabra o gorgonzola, vegetales asados, o propuestas como la de los famosos hermanos Torres de España, quienes agregan un sofrito con trozos de calabaza. En Estados Unidos se emplea una pasta tipo elbow macaroni, aunque se puede hacer con cualquier tipo de pasta corta. Los quesos también varían de acuerdo con el antojo, el único requisito es que se derritan, como el americano (amarillo o blanco) y el cheddar.
Un toque por completo distinto
Dale un giro a los famosos y siempre deliciosos macarrones: añade a la pasta (hervida al dente) un sofrito de aceite de oliva de ajo, chiles rojos, panceta o tocino y trozos pequeños de calabaza, asados en el horno hasta suavizar. A esto agrega a tu gusto queso mimolette francés, queso crema y aceite de oliva. Después, licua con un poco de caldo de pollo para que la salsa (previamente cocinada) sea más líquida. Viértela sobre la pasta en un molde de horno de cristal, cubre con queso parmesano rallado y gratina al horno hasta que se dore. ¡Exquisito! TIP: Agregarles mantequilla y leche suaviza la consistencia de los macarrones y ayuda a que el queso se derrita mejor.
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